Los días pasaron y mi desilusión con Lion tardó una semana en irse, por ende, estuve una semana bajoneado. Como Elías está de novio, su vida no es la misma: está como gobernado, dominado... peor de lo que ellos me criticaban cuando yo estaba en pareja. Son cosas que me molestan y, como dije, no pensé que harían eso porque, cuando yo estaba en pareja, vivían espantados. El sábado de la semana siguiente, Elías no podía juntarse ni salir a bailar porque no sé qué evento tenía y Nazareno tenía el cumpleaños de la madrina. Yo estoy abnegado con Vorterix y no sé por qué, quizás necesito frenar un poco para que después me agarren ganas de salir. Así que, yo tampoco iba a salir ese sábado pero sí nos juntamos con ellos dos a pasear por el Abasto y, después, yo me iría al sauna... Y sí, a ver, tampoco me iba a quedar en mi casa solo. Además, hace cuánto que quiero ir un sábado o viernes directo al sauna y no podía porque siempre priorizaba a mis amigos ante todo. 
En fin, ese día que nos juntamos con los chicos, comimos en el patio de comidas en el Burger King, y ahí les hablé bien respecto a lo que había pasado con Lion. Elías no había visto la captura de pantalla que le envié donde se veía que mi ex novio lo tenía como amigo en Facebook. Me dijo que le preguntaría a su novio qué fue lo que pasó entre nosotros porque el novio de Elías es muy parecido a mí: tiene como un don, en mi caso es la de la intuición, y la de él también pero más desarrollado porque anda en la religión umbanda. Yo no les dije que estaba mal, aunque sí muy desilusionado ya que yo pensé que mi ex novio había quedado en el pasado pero siempre aparece de alguna forma en mi vida. Si no era cuando yo salía a bailar, era porque era amigo del amigo de un conocido mío. Me daban ganas de encararlo a Lion, aparecerle de repente y que hable; y a mi ex novio tenía ganas de pegarle una piña como lo hice una vez y que no me arrepiento. Al final de todo, me terminé dando cuenta que Lion es uno más del montón y se parece mucho a mi ex. Por otra parte, Nazareno me decía que no me ponga mal y que a él no le tenga resentimiento ni nada por el estilo. Fue una causalidad terrible, pero porque todos los putos nos conocemos con todos. 
Mientras comíamos, a dos mesas, había un muchacho de espaldas comiendo con otro y se notaba que eran gay por más que uno, el de espaldas a nosotros, parecía machito. Cuando se levanta el de espaldas yo no lo veo, pero sí vi cuando volvió y le exigió a su chico que era hora de irse de ahí. Cuando lo miré bien me sorprendí porque era un muchacho con el que yo estuve hace como dos años, que lo conocí en Jolie y hasta fuimos a un telo de Villa del Parque juntos... 
Hablando de Lion, yo tenía miedo de cruzármelo en el sauna aunque supuse que no sería tan tonto de volver al lugar donde nos conocimos si, en realidad, lo que menos quería hacer era cruzarme. Tomamos el colectivo en la plaza Miserere y nos fuimos sentados, hablando sobre chicos y sobre otro lugar de gays llamado "Tom's". De tanto hablar de mi ex, se me hizo que un muchacho que salía justo de ahí era él. Le conté a Nazareno que quería tomar alcohol antes de entrar al sauna así estoy más desinhibido, lástima que él no podía hacerme la segunda porque no tenía tiempo y, como dije, estaba cansado. Lo que sí, me acompañó a un supermercado chino para que yo pudiera comprar alcohol y, justo en la puerta, nos cruzamos a su papá que era un señor copado. Le pregunté a Nazareno si una botella de Dr. Lemon con vodka me alcanzaría, pero me dijo que me convenía dos. El tema es que yo debía hacer como dos horas de tiempo porque yo pensaba que era muy temprano ir a las 20hs. Aún así, no sabía dónde me iba a sentar para tomar ya que, como dije también, no da sentarse en cualquier lado de la ciudad de Buenos Aires para tomar alcohol. Después de comprar, lo despedí a Nazareno quien me pidió que tenga cuidado y le avisara cuando llegue al sauna y, más tarde, a mi casa.
Caminé escuchando a Mylene Farmer con su "Rêver" que, desde que pasó nuestra pelea supe era la canción indicada para relatar el fin de la pequeña historia que tuve con Lion. Igual, ojo, no me enganché con él. Sólo que uno, a veces, no piensa en que cosas como las que sucedieron puedan llegar a pasar. Caminé y caminé hasta llegar a la zona de dónde yo estudio: el Palacio de las Aguas Corrientes que, si bien no es el lugar más seguro de la Cdad. de Bs. As., es la mejor para poder bajarme las dos botellas de alcohol que me había comprado. Había mucha gente en la calle ese sábado a la noche, no podía destapar las botellas ya que tampoco daba hacer ruido. Caminé hasta encontrar el lugar perfecto para sentarme: por la calle Lavalle y Ayacucho, en una vereda casi oscura. Hacía frío por eso yo estaba con la capucha puesta, y a metros de mí había una parada de colectivos que hacía que la zona no sea tan peligrosa. Entre a tomar solo, esperando a que se haga la hora pero, resulta que tomé la primera botella y ya me sentía asqueado del Dr. Lemon. Cuando empecé con la segunda botella, un muchacho alto, parecía marcado, pasa por al lado de mí y se va a la parada pero, la verdad, no sé qué colectivo estaba esperando porque pasaron todos los colectivo y no se tomó ninguno. Me daba la sensación de como yo miraba mucho para su lado, por ahí, él quería acercarse. Aunque no lo hizo aun cuando no había nadie en la parada y nosotros estábamos solos en la cuadra. Tomé la mitad de la segunda botella y decidí encarar para el sauna mientras tomaba lo de que quedaba en la botella. Me levanté y caminé dejándolo al muchacho ahí. A las dos cuadras, me deshice de la botella con un cuarto de alcohol porque ya estaba por entrar. 
Tras unos minutos de estar sin conexión, este muchacho me dijo que estaba por la zona del Abasto y que alrededor de las 23 podríamos vernos en Av. Corrientes y Rodriguez Peña para irnos a su casa. Nos intercambiamos números de teléfono y me pidió que no lo dejara colgado porque sería un bajón venir para que no haya nadie. Me dijo que tenía 21 años, versátil más activo, que trabajaba de seguridad y que buscaba alguien con quien dormir abrazados. Un poco sentimental para estar en esta aplicación. Aunque, ojo, todos buscamos encontrar al amor de nuestras vidas pero no sé si el lugar correcto sea eso o decirlo ya que muchos "machos" huyen de concretar algo serio, por más que muchos seamos promiscuos. Lógicamente, que le pedí fotos de su pija porque no quería llevarme el fiasco de ir y que la tenga chiquita, y también le avisé que a dormir no iría porque debía "volverme a mi casa". Mentira, yo quería ir a sauna. Me levanté y caminé, me paré en la esquina en una zapatería de mujer e hice que miraba para no llamar la atención de la gente pero, aun así, te miran igual por estar parado en una esquina. Lo vi llegar de traje, y sí, era alto pero no parecía de 21 años, yo parecía más chico que él. Pareció medio desinteresado, hablabamos algunas palabras mientras nos acercamos a la parada del 37 porque me dijo que nos dejaría cerca y, que por eso, me citó ahí. De última, si yo lo dejaba plantado, se volvería sin problemas. Como de forma forzada me preguntó cómo me llamaba realmente y a qué me dedicaba. Frente a mi respuesta de "profe de inglés", empezamos a hablar en inglés y me contó que tiene que saber inglés ya que, justamente, lo necesita para su trabajo aunque no es un requisito excluyente. Me sorprendió porque, a pesar de su pésima fonética, hablar con alguien no extranjero es difícil de encontrar. Nos subimos el colectivo y fuimos hablando de idiomas como el italiano y el francés, y justamente yo le comenté que estaba interesado en el francés por artistas musicales.
Bajamos cerca del Htal. Garraham, zona que conozco porque, hace dos años atrás, cuando recién conocí a Ian, yo estaba pasando una situación económica pésima y no me quedaba otra que ir en colectivo desde mi facultad hasta Constitución para ir a trabajar al centro de Lomas. Aparte de que, con mi último ex, tuvimos un encuentro en esa zona y después nos fuimos para la casa de sus amigas en Caballito. En fin, paramos en una puerta y entramos, me comentó que la casa era compartida, que el alquila una habitación, que ni siquiera es un departamento porque, lógicamente, no tiene la garantía propietaria. Además, él viene de un pueblo de Buenos Aires que nadie conoce y, por ende, se tiene que conformar con eso ya que, obvio, prefiere la ciudad antes que el pueblo. Su habitación era muy chica que parecía incómoda, él se fue al baño y después quedamos los dos con la estufa prendida porque hacía calor. -¿Qué rol sos? No te lo pregunté porque te vi y me gustaste.
-Versátil más pasivo, igual creo que te lo dije.
-Mejor. Yo no tengo drama con los roles... Sos muy lindo - Finalizó y se acercó a comerme la boca. Obviamente, le respondí de la misma forma. Me comentó que estuvo en el ejército, por lo tanto yo me lo imaginaba marcado pero no, me dijo que le gustaba la electrónica y pondría un poco de música para que las otras personas no escucharan lo que no tendrían que escuchar. Fue así como se desprendió la camisa y se sacó los zapatos, dijo que estaba cansado de vestirse así, pero a mí me calentaba. No me gustaron dos cosas de él y esas fueron las razones por las cuales no volví a contactarlo por más que él sí: sus medias estaban sucias, mojadas en la parte de los dedos, y eso me generaba desagrado, y que se bajó el cierre del pantalón de vestir, entonces cuando yo aproveche a tocarle el bulto mientras él estaba de espalda (y que se asustó), no tenía bóxer ni slip. O sea, directamente le toqué la pija y había algo prometedor, pero en la previa, el bóxer juega un papel muy importante para mí porque me calienta. Pensé que quizás, cuando fue al baño, se lo sacó aunque después me aclaró que no usa porque le molesta.
Apagó la luz y se la empecé a masajear y se le paró, le gustó que se la toque de una. Se terminó de desvestir y yo hice lo mismo, nos comimos la boca y terminamos en la cama. Nos pusimos de costado y, mientras nos besábamos, yo lo pajeaba y él a mí. Hay algo que yo no quería y era que él me cojiera porque me dolía y tenía picazón en la cola ya que, de no cojer casi por tres meses a cojer en un mes todos los fines de semana, mi cola se estaba acostumbrando. Algo similar a lo que me pasó al mes de ponerme en pareja con mi último ex donde cojíamos a full re morbosos, pero después me dolía y se me irritaba mi agujerito. Al instante se la chupé mientras él estaba de costado, su glande no se bajaba del todo así que tuve que salivar mucho para poder pajearlo y disfrutar de cada centímetro de su pija que no era tan grande como yo supuse. Me la comía toda, me encantó hacerle garganta profunda para ahogar con su pija hasta el fondo de mi garganta. Como yo tenía la pija parada, me dijo que me la quería chupar, así que lo dejé. Lo bueno que no se quejó ni nada por el estilo porque yo le había avisado que era más pasivo. También se la metía hasta el fondo y eso le producía pequeñas arcadas. Después hicimos un 69 hasta que le dije que parara porque me hacía cosquillas. Seguí chupándosela yo un rato largo pero quiso cojerme:-Mmm, hace mucho no cojo - Mentí - Dudo que me la puedas meter porque me va a doler - En realidad, yo había comido como el gordo de alma que soy y tenía miedo de manchar.
-Intentemos. Tenés muy linda cola y quiero probarla. Lo voy hacer con cuidado.
-Me duele. No creo que se pueda - Le dije con miedo. Él continuó, pero desistió cuando no la pudo meter. Me la chupó unos segundos y me dijo que si yo me animaba a metérsela a él, a lo que le dije que sí. Por ende, se puso de costado, y al toque entró mi pija. Pude sentir cómo su culo se dilató enseguida y quedó abierto de par en par dándole vía libre a mi pija para que entre toda. En cambio, a mí me re cuesta que entre al principio, es todo un ritual pero, una vez que entró, entra y sale sin problemas. Pegó un gemido este chico que se puso en putita y entré a cojerlo pero, obviamente, yo de activo no tengo mucho ya que el morbo que me generaba en ese momento era estar cojiéndome a alguien más "grande" de cuerpo. Cuando entró toda mi pija, quiso sentarse arriba de la mía pero ya me empezó a doler y le dije que no, que se la metía de costado nomás. En realidad, tenía miedo que se me dañe el frenillo como me pasó una vez con mi ex que, al metérsela, cerraba el esfínter y me hacía doler llegando al extremo de haberme sangrado. Me seguí masturbando hasta que me dijo que quería probar él en metérmela.
Me puse boca abajo y, tras intentar, me dilaté y me la puso. Gemió de placer al entrar toda su pija adentro, aunque le pedí que sea cuidadoso. Me cojió en varias poses, de costado y boca abajo para que a mí no me doliera,despacito y fuerte. Lo que él no quería era darme con todo porque seguro lo iba a hacer acabar:-¿Dónde querés la leche? - Me preguntó mientras tenía su pija toda adentro.
-En la boca - Le respondí a lo putita.
-Bueno, anda preparando así te la tragas toda - Me dijo - Intentamos cojer yo sentándome sobre su pija y pude aguantar algunos minutos. También lo extasiaba eso. Volvimos a la pose boca abajo y, mientras yo sacaba culo y él transpirando me decía que tenía el re buen culo y que lo hacía ver las estrellas.
-Me duele un poco - Le mencioné y me dijo que aguantara, que ya se venía - Dámela en la boca - Le dije pero él siguió cojiéndome
-Pará que ya acabo, boludo. Te voy a acabar adentro, te acabo adentro... - Y me llenó el orto de leche pidiéndome disculpas por no dármela en la boca - Me excité mucho - Se acostó sobre mí dejando que su pija muera adentro y después la sacó. Nos limpiamos y me dice -¡Fua, boludo! Me hiciste acabar al toque. Yo siempre tardo banda. Qué buen orto tenés. Me encantó... es más, creo que fue el mejor orto que probé y, te digo que la mejor cogida.
-¿Vos decís? - Le pregunté sorprendiéndome por lo fascinado que estaba este chico.
-Sí. Te lo afirmo: la mejor cogida por encima de cualquiera con el que garché. Te acabé adentro... me la pediste en la boca, pero no quise sacarla - Cuando se volvió a acostar, yo tenía la chota al palo. Me empecé a pajear y me dijo que acabara para él, y en dónde quería acabarle. Le contesté que en la boca si él quería. Mientras yo estaba acostado, él tomó el rol de pasivo y me la chupó mientras yo me pajeaba... cuando iba a acabar, no sacó su boca de mi pija y se la llené de mi leche. A lo que tragó toda, sin desperdicio. Encima con la calentura que yo tenía, seguro fueron litros de leche y él sin ningún problema tragó toda.
Le pregunté si él tenía algún problema de que yo me quede a dormir con él porque, seamos sinceros, yo no tenía ganas de ir al sauna después de acabar, y el frío y el viaje me quitaban toda calentura. Lógicamente me respondió que no, que le encantaría que durmamos juntos abrazados. Él dijo que iba a ir al baño pero, en realidad, me dijo que en la terraza podíamos hacer pis en la pileta del lavadero ya que nadie sube a esa hora y que no le daban ganas de bajar para usar el baño compartido. A mí la vejiga se me exlotaba, así que tardé más. Al bajar y acostarnos, empezamos a hablar de los gays en general, y él me comentó algo muy por encima de sus primeras relaciones en su pueblo natal. No está acostumbrado a ser demostrativo ni afectivo pero porque allá, tener relaciones con un hombre era algo totalmente prohibido, donde ni siquiera los hombres te daban un beso, sino que un pete y listo, o a lo sumo penetración. Sus padres no ayudaron mucho porque lo criaron a la antigua, que todo lo descubrió al venirse a la Ciudad capital. Este muchacho también me dijo que le gustaba ser versátil aunque, un día, tuvo un desgarro anal que le hizo doler mucho y no volvió a ser pasivo por un largo tiempo, más por el miedo que le generó el dolor ese. Igualmente, siempre le gusta estar con "pasivos" y que esos lo cojan a él, es un morbo. Aunque él, en cierta forma, se reprime porque no le gusta ir a boliches de 'putos' con esa música de 'putos' ya que él es un poco facho y no tiende a mezclarse tanto con el resto de los putos. Igualmente me dio la razón de que él es un poco inentendible y nadie le va a hacer cambiar sus mambos, pero lo bueno era que no vivía bloqueándose o llorando por todo eso. Hablamos de nuestros ex novios también, por una cuestión que él mencionó y, entonces, yo le pregunté si conocía a mi ex porque lo único que faltaba era eso.
Antes de dormir, me dijo que me sacara el bóxer sino él también dormiría en bóxer. Le hice caso, pero después me lo puse porque quizás iba a dormir incómodo. Comencé a tocarle la pija otra vez, iba a costar que se le parara porque habíamos estado anteriormente cojiendo los dos a pleno. Para eso me pidió que se la chupara porque, además de yo chuparla bien, le re calentaba. Hice el esfuerzo por más que no quería, pero me dijo que si yo la quería tragar, que se le sacara yo la leche. Se la chupé y se la chupé pero, cuando lograba ponerse dura, enseguida se le bajaba. Yo me seguí masturbando porque estaba caliente, fueron varios meses de abstinencia sexual. Me propuso algo, que podíamos mirar porno si yo quería para poder acabar los dos. Obviamente, este chico no era ni mi novio ni nadie así que, para acabar en el momento, venía bien. Si hubiese sido con mi ex, lo hubiera pensado dos veces porque, de haberlo hecho, lo hemos hecho, pero siempre en un momento de confianza mutua. Si estábamos de mal humor, dudo que hubiésemos querido con mi ex. -Me gusta que tengas el mismo morbo que yo, me siento más libre -.
A eso de las 7am me despertó como queriendo cojerme pero, sinceramente, yo tenía más sueño que ganas de cojer. Y más después de haber acabado dos veces en una noche. Me hice el boludo y no le di pelota para que diera cuenta que quería seguir durmiendo. Alrededor de las 12pm me desperté y él me dijo que me quería cojer pero, obvio, que le dije que no y que me tenía que ir porque ya era tarde, siendo que la excusa que le puse anoche fue que no podía quedarme porque yo había dejado todo encendido en mi casa. No quiso que yo me vaya, creo que hasta quería retenerme, pero le repetí que me tenía que ir así que me levanté y me cambié. Le pregunté algunas cosas sobre los colectivos que me llevarían a mi casa, algo del metrobus y las cuadras que debía caminar. Sin lavarme la cara ni los dientes, me puse en condiciones, entonces, él se levantó y me acompañó hasta la puerta despidiéndome sin ganas de haberse despertado. Salí y me dirigí hacia Av. Juan de Garay hasta que vi la parada del 133 por lo menos que me llevara hasta Pqe. Patricios. Como deduje que iba a tardar, me fui hasta la avenida pero no había paradas. Caminé hasta el Htal Garraham y esperé el 188, sin miedo ni nada por el estilo a pesar de que la zona sea horrenda y más un domingo al mediodía, solo hacía mucho frío y no me quedaba otra que aguantar. Viajé escuchando esta canción que le da título a este capítulo y llegué a casa casi vestido de joda. Compré para cocinarme y, mientras lo hacía, escuchaba nuevamente esta canción, contento por haber vuelto sano y a salvo, y estando calentito adentro.
Durante las semanas siguientes me habló por whatsapp, la primera vez le contesté porque había borrado su número de contactos y no sabía quién era. Nuevamente me habló a la salida del sauna diciéndome que si quería, vaya a su casa pero le dije que no, que me estaba volviendo a mi casa. Y antes de ayer, también me habló. Lógicamente no le contesté porque estaba en el departamente de un chico y no daba tener conversaciones de chongos. No le clavé el visto y directamente borré su mensaje. Pasamos un lindo momentos juntos, pero no me fascinó... quizás porque yo venía de haberme ilusionado con tan poco por parte de Lion y, encima, de haber calmado una bronca interna con mi ex.
F.A.M.
