Viernes 27/03/2015 A pesar de lo que voy a contar ahora, no cambia la forma en que amo a Ian, sin embargo, esto es, más que una fantasía, un fetiche. Por más que suene raro, quiero que lean lo que voy a relatar hoy. Está más que claro que cuando conocí a Ian en el túnel de AMK, no solo me tragué su leche, sino también la leche de otros a los que, entre los dos, le chupamos la pija. Obviamente a mí no me importó nada, aunque a los meses que empezamos a salir como "pareja", él me pregunté sobre esa noche y le dije que sí: que había tragado leche de los otros. Lógicamente, me dijo que si alguna vez hiciéramos eso los dos juntos que no quería que yo tragara. Mi respuesta fue "Ok, no hay problema". Aunque esto no se cumplió. El también me dijo que cuando estuviéramos en una situación así, que no intercambiáramos números ni nombres ni nada. No obstante, el fue el primero en romper la promesa a los 4 meses desde que empezamos a salir.
Esa primera vez no planeamos nada, surgió por surgir. Fuimos a bailar a Plop con mis amigos y obviamente Ian, aunque con el alcohol y las ganas, nos pusimos a chapar en la "pared de la perdición". En eso, vemos que un chico que estaba casi a lado de nosotros miraba mucho, y a Ian le gustó. Primero me preguntó si podíamos hacerle algún gesto, yo acepté; y tras eso, este chico se acercó y vino. Pero como mis amigos estaban casi en frente nuestro, sin levantar sospechas, le hicimos una seña al chico y nos fuimos a la parte de arriba. Ahí nos besamos entre los tres, noté que Ian tenía ganas, y además nos empezamos a tocar. La cosa que yo les chupé la pija a ambos, y después el pendejo nos la chupó a nosotros dos mientras nos besábamos. Obvio que ni idea si alguien más nos vio, pero probablemente. La diversión terminó cuando uno de los de seguridad pasó y nos dijo tocó para que dejemos de hacerlo, por suerte no nos echó del boliche. Entonces ahí fue cuando Ian le dijo nuestros nombres y me pidió darle mi número de teléfono a este chico. Por más que nada más haya pasado, me molestó su actitud que, más tarde, se lo dije.
La segunda vez fue en Mardel, esa misma noche que vi a 'Tincho'. Nosotros estuvimos chupando pija a full pero uno que agarramos primero, empezó a decir que era el sueño del pibe, que no podía creer que dos chicos le estuvieran chupando la pija, que no quería acabar, que nos quería llevar a su depto, pero estaban sus padres... en fin: no acabó. Y otros que agarramos, que eran pareja, nos invitó a su depto, sin embargo le recalqué a Ian lo que él dijo una vez. Por eso solo le chupamos la pija a los dos, uno con cada uno, sin embargo la pasiva se fue y lo dejó al otro solo. Y por más que no quería acabar tampoco, yo le empecé a pedir la leche. Ian me dijo que cuando acabara que le avisara, así que me pinchó el globo y, cuando convencimos que acabara, nos acabó a los dos. Esta vez hice lo mismo, tragué la leche del pibito ese antes que me besara o quisiera que escupiéramos.
Esta última fue mejor. Hace unos meses que no salimos porque desde que el hermano de Ian tuvo un accidente, él tuvo que trabajar por su hermano. Y chau fines de semana a la noche. Este pre-feriado acá en Argentina, salimos y mis amigos nos iban a estar esperando adentro del boliche; pero cuando llegamos estaba con capacidad llena y no nos quedó otra opción que ir a AMK: casi vacío y sin ningún chongo en el túnel. Sentado nosotros dos, eligiendo y sin ninguna opción, a punto de cerrar, nos cambiamos de lugar y vimos a tres pibes que estaban chapando al lado de nosotros. Ahí nomás pelaron las pijas y se tocaron, al instante uno se fue y quedaron los dos. Le pregunté a Ian si quería y aceptó, así que él con uno y yo con el otro. Ian se quedó con el más pibito, pero que obviamente tenía una chota normal, y a mí me dejó con el otro que tenía la chota más grande y ya estaba al palo. La cosa que le pendejo hace rato nos había visto ahí y se dio cuenta que somos pareja, sin embargo cuando se la chupé, sentía sus orgasmos pero no pensé que me iba a acabar. La cosa que cuando se la estaba chupando me acaba y lo primero que hice fue tragarla ya que él no gimió ni nada, la hizo silenciosa. A los segundos, Ian me pregunta si él había acabado, cosa que negué y le dije que al parecer, se le puso flácida cuando él mismo me dirigió mi mano a sus nalgas. La cagada fue que cuando Ian se la empezó a chupar también, largó una gotita de leche. Pero nada, al ratito vino el patova, diciendo que nos vayamos que ya estaba por cerrar el boliche.Viernes 10/04/2015
Últimamente,
estuve pasando por momentos de melancolía pensando en cómo era antes mi
barrio, ver mi cuadra en donde crecí, y que nada sea igual como
"aquellos tiempos", y que las personas que solían estar, ya no lo están.
Me miro cómo soy ahora y me doy cuenta por todos los estadíos que pasé,
cómo evolucioné y cuánto sufrí. Me di cuenta hace mucho que ya no me
interesa mi familia, antes estaba presente en todas las reuniones y
ahora ni siquiera sé cuándo las hubo. Desde
que mi mamá y mi papá se fueron, prácticamente me desligué de ellos por
completo y, hoy en día, que tengo que soportarla a mi hermana que
vuelve a vivir conmigo, la odio. Tengo que afirmar que, desde que entré a
este mundo distinto para la sociedad y para las personas comunes, yo
mismo cambié y solo me importan los mismos a mí: quienes no me juzguen
ni con los pensamientos, y los que son iguales a mí y se "bancan" ser
como somos en la sociedad. La vida se me hace más corta día a día, todo
se va terminando y tengo miedo, por dejarme estar. Haberme puesto en
pareja hace 7 meses y 8 días, lo considero un error, y me arrepiento al
darme cuenta que estar de novio es lo mismo que estar preso, sin
posibilidades de tener tiempo para ponerse a reflexionar sobre la vida
ni sobre uno mismo. Pero qué sé yo. 
Cuando uno está soltero, lo único
que quiere es estar en pareja, y cuando uno cree que encontró al amor de
su vida, quiere estar soltero. Con Ian hemos tenido millones de
discusiones, por desconfianza sobre todo, porque los dos somos de desear
a otros chicos, y porque creíamos que cada segundo que pasábamos
separados, el otro nos engañaría. Ambos tenemos nuestro prontuario, pero
el desear y excitarse con otros, nosotros dos lo sentimos; y al estar
expuesto a una "señal" de algún desconocido en la calle, lo
aprovecharíamos. Pero aún así somos tal para cual, porque supimos
acostumbrarnos el uno al otro, y divertirnos y tomar del otro lo que
necesitábamos. Aunque todo aburre, al menos a mí. Y estar siempre en lo
mismo es algo que no me satisface naturalmente...
Durante
los primeros años de mi infancia, recuerdo que la vergüenza y la
timidez me ganaban, como para no querer hacer pis frente a mis
compañeritos en el baño del jardín. Otro recuerdo similar es el de estar
en la práctica de fútbol después de clases del jardín y ni siquiera
saber qué es el fútbol; pero yo supongo que mi papá me anotó ahí porque
cuando me lo propuso, no supe contestarle, y también para que sea un
chico igual que los demás. Pero no. Aún no sé si nací gay, supongo que
no porque las mujeres me gustaban; quizás los indicios se presentaron a
temprana edad. Entonces toda mi vida odié el fútbol hasta hoy en día,
cosa básica para poder desarrollarme con los chicos de cualquier lado.
Cuando
mi infancia parecía haber terminado, junto a esos "juegos sexuales", a
punto de entrar a la pre-adolescencia, tuve a mi lado a mis amigos del
barrio, de esta cuadra, que ahora me da tristeza saber que todos
crecieron y tomaron riendas en su vida y se despegaron y no están más.
Algunos, otros no. Fue con ellos con quienes compartí aquel verano de
2004, donde hubo carnavales en el barrio, y mientras tanto me daba
cuenta de cómo mi mentalidad estaba cambiando. Un primo cercano se había
ido, y otro primo cercano había vuelto a aparecer en mi vida. Fue con
quienes yo jugaba a los videojuegos. Entonces, de ahí, crecí como
aficionado gracias a ellos, a mis primos. No recuerdo cómo, pero mis
amigos desaparecieron del barrio, nos separamos, tan solo recuerdo estar
tocándome con ese primo mayor nuevamente, y con otro de parte de mi
papá. 
Al
entrar a la adolescencia, a la secundaria, aparece otra vez aquel primo
cercano que se había ido, y por inercia, vuelvo a tocarme con él,
aunque esta vez ya no éramos niños, sino adolescentes. Aquellos
compañeros del colegio, ahora de la secundaria, parecían haber cambiado
radicalmente (la edad y el hecho de la escuela media), mi miedo sembraba
en torno a lo desconocido de la escuela media. Desde ese momento,
empecé a conocer gente y gente, y a llevarme bien con todos en la
escuela, a pelearme con otros pero siempre con bajo perfil y miedo a la
vergüenza o humillación; a tocarme más y más con dos de mis primos y
después con otros dos, a tener contacto sexual (léase penetración y sexo
oral), me empiezan a discriminar en la escuela, según por actitudes de
gay que unos compañeros de la primaria supieron adjudicarme, en el
barrio no podía encajar con los chicos de mi edad y los que, ahora eran,
los nuevos "chicos de la cuadra". 
Todo
eso termina cuando finalizo la escuela secundaria y me alejo de aquella
etapa oscura, de sufrimiento y bullying. Me dejé de hablar con mucha
gente, me acepté como gay con ayuda de mi mismo y de gente que no conocí
en persona. Empecé a trabajar y a ganar mi propio dinero en un trabajo
que salió por arte del destino, y mi primera experiencia de la vida real
fue el concierto de los Backstreet Boys en el 2011 donde conocí a
actuales amigas que no fueron del barrio ni de la escuela. Mi mundo fue
otro. También conocí a otras personas en otros recitales, y experimenté
otro tipo de amistades: conexiones por medio de gustos y no por
"obligación" de pertenecer a "algo". Al abrirme y empezar a a decirle a
un grupo selecto sobre mi condición sexual, exploré mi primera salida al
ambiente gay y fue la primera vez que tuve contacto sexual con una
persona que no fuera mi primo. Y así seguí, con problemas porque yo
mismo no me conocía como era en el amor o en el sexo, hasta que al pasar
los años me fui conociendo.
Para
las personas que leyeron todos los capítulos de mi vida, sabrán mi
situación actual porque justamente, lo que escribí en este blog, fue a
partir de mi entrada al ambiente gay. Solo me siento un poco melancólico
porque ya no pertenezco a la cultura de este barrio. Todo me trae
tristeza, además de no poder ser como quiero ser por la cultura y poco
conocimiento de lo "distinto". Más de una vez planeé irme, pero no,
después decidí quedarme, pero ahora, en pareja, está la idea de querer
irnos. Pero no sé, volvemos a lo que dije al principio. Las
cosas con Ian no están en sus mejores momentos, no quiero separarme,
pero a la vez siento la necesidad de estar con otro chico sexualmente,
de sacarme las ganas. Quiero salir a bailar con mis amigos, pero él me
lo prohibe ¿entonces? Son muchas cosas que pasan por mi cabeza, y siento
que no estoy haciendo nada de lo que solía hacer, y eso me divertía.
¿Será que me cansé de estar en pareja? ¿Todo el mundo se cansa de estar
en pareja con la misma persona? ¿Por eso tanta infidelidad?
F.A.M.
