Pages

sábado, mayo 16, 2015

#123 - Locura Temporal

Después de mucho tiempo vuelvo a aparecer. Hace varias semanas que quiero aparecer pero estoy con un stress increíble que no puedo hacer todo lo que quiero hacer. Engordé 8kg desde que Ricky y Andrés se habían quedado en casa (allá por Julio/Agosto 2014) hasta hoy en día. También se debe a que, cuando conocí a mi novio actual Ian, era ir a cenar todos los días o comer en casa. Hoy en día, Andrés está en Mendoza Capital, se separó del chico con el que estuvo 5 meses. Al concretar, se vino desde su pueblo allá en Mendoza, hasta Berazategui para convivir con él; trabajaba en el mismo comercio porque era plata que ambos juntabas; aunque al separarse, el se volvió a su pueblo y al instante, uno de sus muchos chongos, le tiró el lance para que esté nuevamente con él. Pero para eso debía viajar a Mendoza Capital... y ahí está, yo hablo con él muy de vez en cuando pero nos mantenemos en contacto porque pasamos muchas momentos lindos y de mucha risa. Con Ricky todo bien, lo veo seguido. Entonces, recapitulando, Se me pasó por la cabeza dejar la facultad para poder hacer otras cosas como ir al gimnasio y tener el cuerpo que siempre deseé, pero mis estudios con más importantes ahora que las cosas en mi laburo no están tan buenas; por eso, prefiero recibirme y no estar en este laburo donde tenés que apiadarte de las personas que "les fue mal en sus vidas".

En fin, una de las últimas veces que salimos a bailar con Ian a Plop, se enojó y yo me enojé por boludeces, sin embargo, él, a la salida, propuso que nos separemos porque estaba cansado que siempre nos peleáramos por mi idea de salir a bailar solo cuando él trabaja. En un momento, dije que sería lo correcto porque yo no voy a dejar de ver a mis amigos por él. Se lo dije y se enojó, aunque es la verdad. Así que, me estaba haciendo un favor; pero después, en el transcurso de la charla y las lágrimas, me hizo dar cuenta que ya estamos formados como una pareja, y que no da que nos separemos y listo. En parte, nos consumió la rutina. Hicimos las pases y volvimos a dormir a mi casa, a descansar.

El día de mi cumpleaños, Ian también se había enojado porque estaba celoso de un amigo y conocido de Elías: Brian, que forma parte de nuestro grupo, pero que Ian no vio nunca. O sea, con el pibito nunca nada, es más, me chamuyó antes de que yo lo conozca por medio de Elías aunque nunca nada. Este mismo día, fue cuando le tuve que decir que mis amigos eran más importantes porque a él le molestaba que yo no esté pendiente de él, siendo mi cumpleaños donde mis amigos por primera vez visitaron mi casa. Después solucionamos las cosas, pero él debía aceptar que no es el centro del mundo y que, a veces, otros necesitan mi atención más que él. Este mismo día, mi hermana me confirma que tenía problemas en donde estaba alquilando porque había terminado de estudiar y no conseguía trabajo para pagar. Por ende, y previamente hablado con mi mamá, debía volver a mi casa donde yo, desde hacía 6 meses vivía solo. Además Ian me había ayudado a arreglar la casa, entre otras cosas pintar y tirar todo lo que no servía, después de la mudanza de mis papás. Al principio no le di importancia, porque es mi hermana y estaba mal. Aunque luego lo pensé en frío y me di cuenta que todos los planes que tenía para mi futuro se desmoronaron. Tenía pensado hacer mi vida en esta casa y en este barrio donde siempre viví, ya que la casa había quedado para mí solo; ahorrar y no tener que pagar alquiler, modificar la casa y terminar una parte del piso superior. Estando mi hermana es imposible, no sé cuándo se va a ir, pero yo no puedo estar conviviendo con mi hermana y sobrina, estando de novio... y más como soy yo, que no me gusta estar con gente.

Ok, otra vez empezamos con Ian a ver si podíamos mudarnos, como están las cosas tanto a nivel país, como nuestra situación económica. Yo y mi trance entre distintos laburos, las elecciones políticas y que no se sabe que va a suceder a fin de año, etc. No me quise ilusionar en salir de este barrio porque sabía que nada se iba a concretar porque, en cuestión plata, nos conviene como estamos. Pero a las semanas, nuevamente, la ilusión de una nueva vida, adaptarme a lo que yo considero la sociedad, y no este barrio donde ser "alguien" es tener una moto y hacer ruidos con ella en la vía pública, o juntarse en la esquina a fumar porro. A veces, a la noche, es un caos poder tomarte un colectivo para ir a capital ya que a un determinado horario, o no pasan, o tardan mucho. Ahora quedó todo en stand-by porque, como dije, estamos mejor así sin derrochar la plata que apenas nos alcanza.

Hay mucho por contar, quizás ahora se me nuble la mente. Otra cosa de la que quería hablar es de aquellas situaciones que se me pasa por la cabeza, quizás sea eso de imaginarme otra vida que yo pude haber tenido viviendo en otro lado y siendo chico de otro barrio, que otras cosas se hayan sucedido, y que las situaciones que se hayan dado de otra manera. Me remonto a mi vida, a los 11/12/13 años. Nunca pensé que familiares que viven cerca, como mis primos o mis tíos, aceptaran mi condición sexual y que me saludaran como si nunca hubiera pasado nada. Creo que debe ser porque somos grandes, y que haberlo hecho cuando tenía 14 a que ahora que tengo 21, cada uno se ocupó de sus cosas. Me recuerdo noches de verano yendo a lo de mis primos Rodrigo y Federico, jugar a los videojuegos como "Parasite Eve 2" y "Resident Evil", noches donde eso se limita a nuestros padres, pero ahora que ya crecimos y somos jóvenes libres, me encantaría recuperarlo. Series que vi en aquellas épocas como "Spider-man" y deseos de escribir mi propia historia. Hace bastante que no veía a Rodrigo pero como está de novio con una chica que vive a la vuelta de mi casa, lo veo seguido, y más ahora que se dignó a terminar la secundaria, en el mismo establecimiento donde yo trabajo. 
Tan solo me imagino haber crecido en otro lado, donde los chicos sean de otra forma. Una vez se me vino a la mente un dejavu donde yo estaba con un chico más, en una casa tenue con luz de velador, chica, sin patio, pero en una habitación donde jugábamos videojuegos libremente como quizás lo habremos hecho nosotros. No estoy en condiciones de comparar porque mi infancia y mi pre-adolescencia fueron lo más. Todavía puedo recordar cuando la vereda de mi vecino era el lugar donde nos sentábamos todos los chicos del barrio; pero, como conté anteriormente, todos ellos ya hicieron sus vidas y pareciera que el que todavía persiste en disfrutar de la vida soy yo. También se me vino como un dejavu, o un sentimiento de querer que sea así, yo integrante de una banda de rock/pop, con chicos de mi edad o un poco más, haciéndoles el aguante en ensayos, ayudando a componer letras. Y para hacerlo más interesante, mezclar relaciones homosexuales con ellos, que no se inhiban con el "qué dirán" y que todo quede dentro del círculo de amigos. Igualmente, quizás la flashee pero la vida es larga y da para todo...

F.A.M.