#200 - Supermodelo

Al fin, encuentro un espacio en mi agenda para seguir redactando mi vida, uno de los pasatiempos que más me gusta de mi vida. Lamentablemente o no sé si dar gracias al cielo, este año está siendo bastante cargado ya que como dije, este es mi último año de estudio y le estoy metiendo pata aunque no me sienta motivado en absoluto. Lo único que me hace mirar hacia adelante es que este año es el último. Con respecto a trabajo, tuve que hacer una ensalada de horarios y jugar con el azar para elegir lo que más me convenía sin tener que renunciar a otros. Es verdad que, a medida que encuentro puestos de trabajo mejores, mayor es la estabilidad y, por lo tanto, me exigen un poco más de esfuerzo para todo. No como el puesto de trabajo al que yo estaba acostumbrado a que no me exijan, pero que siempre tenía problemas con las personas. Pero a la vez, tengo miedo de equivocarme y pensar que, por mudarme, mi vida iba a cambiar radicalmente ya que yo sigo siendo el mismo que cuando vivía en mi antigua casa aunque recargado. No sé cuál es el problema que tanto me estresa y me deja agotado. Yo pienso que es el estudio. Pero eso lo voy a corroborar el año que viene cuando me reciba. Así que, como dije en el anterior capítulo, estuve preocupado por eso y me alejé por un mes y algo de mis amigos. 

Con respecto a lo último que hablé, Mauricio se terminó enojando (tal como yo sabía que iba a pasar) según él, porque yo lo expuse frente a todos en el grupo de Whatsapp dando a entender que me iba por situaciones incómodas con él. ¡Y menos mal que se dio cuenta! Eso me lo dijo después de haber ignorado un mensaje de Wpp de mi parte por casi una semana. Sinceramente, poco y nada me importa de él en este momento porque me llueven muchas críticas negativas de él de personas cercanas a mí. Además de que ahora empezó una relación a distancia, y de larga, con este chico del interior, y tal parece que tiende a alejarse como hizo la segunda vez que volvió con su ex, el trastornado ese. Se excusó conque fue el cumpleaños de su mamá y no quería contestarme a las apuradas, pero yo lo conozco y sé que es porque se la pasa hablando con este chico ahogándolo y sin dejar que haga su vida normal. Ya no estoy predispuesto a luchar por su amistad si vuelve a cometer errores que le recalqué que, a mí, como amigo me molestan demasiado; que tiene que aprender a escuchar a sus amigos y dejar de lado el ego.

Practicamente, resumí mi vida sexual a un grupo de tres chicos con los cuales me veo desde hace unos meses atrás, pero cuando realmente tengo ganas de garchar, nunca están ahí. Por ahí, pienso por qué cuesta tanto volver a conseguir algo serio. Hay chicos que se separan y vuelven o se separan y encuentran algo enseguida. Yo hace tres años que estoy soltero. Está bien, estuve casi un año haciendo el respectivo duelo y justo ahí conocí a posibles candidatos que se quedaron en esa categoría por el hecho de mi desestabilidad; sin embargo, dos años es mucho. Desde que corté con Joel y me puse en pareja con Ian pasó un año y medio. A veces el tiempo parece que pasa lento, pero me miro y me doy cuenta todo lo que pasé. Es verdad que me gusta salir a bailar, la preocupación del vivir solo y que mi economía no estuviera bien me hacen restringirme.  Además, en la semana siento que no rindo y que vivo con sueño. A todo esto, tengo la esperanza cada vez que viajo a Capital en hora pico en tren y subte poder manosear un buen bulto o algo más zarpado. Suena a fracasado, pero muchos hombres se dejan llevar por la adrenalina del momento, el saber que después no nos vamos a ver más y que nadie se lo dirá a su entorno. Siempre leí y fantasié con eso en colectivos ya que por mi casa sólo tenía colectivo; y en subtes siempre tomé la de menor movimiento que era la H. Hace tiempo cuando yo estaba en pareja, con mi ex novio Ian nos tocábamos en el colectivo cuando iba muy lleno y quedábamos aplastado adelante. Ahora, aAl mudarme y tener que tomar una ruta distinta para mis viajes, el tren y subte son mis predilectos. En lo que va del año, toqué tres pijas: una en el tren alrededor de las 7.30am y dos en el subte alrededor de las 7.45 y 8.45am. Dos de esas me la apoyaron y una toqué yo. Está muy bueno, pero quiero más.

Tenía pensado relatar un poco de mi vida del pasado y las canciones que fueron marcando cada uno de  los momentos, pero todavía tengo que seguir terminando algunos capítulos que quedaron incompletos por no haber tenido el tiempo correspondiente para hacerlo. En realidad, quiero hacer más cosas de las que me imagino y de las que el tiempo no me permite. Las cartas de Tarot esperan por ser tiradas, mi guitarra eléctrica por ser tocada, mi voz por ser sonada. Sólo un poco más, un tiempito más y voy a cerrar una gran etapa de mi vida. Viene algo lleno de magia y algo grande, importante. Así que nada, a darle para adelante.

F.A.M.