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viernes, octubre 19, 2018

#206 - Volver a Mis Orígenes

En el día de hoy, voy a tratar de hablar de varios temas que rondan el título de este capítulo. Cuando hablo de orígenes, hago referencia a varios momentos o lugares de mi vida ya que, como saben, estoy pasando por una instancia de mi vida en donde me di cuenta que yo nací en un lugar equivocado. Es algo parecido a las personas que nacen en cuerpos equivocados aunque, si bien yo me di cuenta de esto hace muchos años sobre todo cuando recién terminé la secundaria, recién hace un año pude confirmarlo e intentar resolverlo. Es difícil explicar cómo me siento, no es un estado melancólico ni nada por el estilo, es una confusión y replanteos existenciales.

A sí mismo, tras hablar con uno de los muchahos que me veo de Grindr, le conté acerca de mi transición; y, además, le relaté otro tema que también estaba viviendo aparte de nacer en el lugar equivocado. Esto tiene que ver con lo que me había dicho una vez la mujer del tío de mi ex Ian. Fue una mujer con la que me sentí muy identificado en muchas cosas y, desde el primer segundo que la conocí (también era relativamente nueva en esa familia), me di cuenta que se parecía mucho a mí: era del mismo signo y hasta cumplía en el mismo mes que yo, no recuerdo bien. Un determinado domingo habíamos ido a pasar el día en su quinta y a la busqué por todos lados porque tenía que decirle algo y la encontré saliendo de su casa, encerrada.
-¿Por qué no estás con todos acá afuera? - Le pregunté yo después de decirle lo que le tenía que decir.
-Es que yo soy medio autista, estoy un rato con la gente y después ya quiero encerrarme y estar sola - Me respondió ella.
-Ah sí, sos como yo - Me reí - Estar todo el tiempo con gente me molesta después de un tiempo.
Entonces, desde ahí empecé a decirle a todos a modo de chiste que yo era "un poco autista" porque no me gustaba estar con gente y que, después de un tiempo, quería estar solo y encerrado en mi mundo que pocos entienden. Y este muchacho de Grindr al contarle mi tema con las personas, me dijo que probablemente yo tenga algún grado de austismo menor. Por eso, me puse a pensar los momentos de mi adolescencia cuando yo me la pasaba encerrado en mi habitación con mi computadora y que nadie entendía por qué yo me la pasaba en "la cueva", como me lo han dicho mis papás. Yo sabía perfectamente que no encajaba con cualquiera persona, que yo no quería estar con cualquier persona y que después de un tiempo con gente, necesitaba encerrarme en mi mundo, como lo estoy haciendo ahora.

Esta canción habla de un agradecimiento hacia la "madre" y este último tiempo que mi mamá estuvo en Buenos Aires, pude entablar conversaciones de adultos con ella y sacar cosas muy fructíferas para seguir conociéndome, o mejor dicho, para conocer el que yo fui de chico ya que pocos recuerdos tengo. La otra vez que fui a almorzar con ella, le conté que había soñado a causa de las pastillas que tomo que conocía a dios en el cementerio de la Chacarita y me daba poderes para curar a la gente, entonces, lo primero que yo hacía era ir a un  hospital que, en realidad, era un loquero oscuro y curaba a una chica morocha. De ahí, se desató una charla con mi mamá y le pregunté si ella creería que yo estaba loco si le decía que yo siempre supe que tenía un poder. Mi mamá me respondió con total sinceridad que no porque ella está metida en el tema espiritualidad y está al tanto de temas así que a cualquier otra persona le parecería un disparate. Le conté ciertas cuestiones que se me venían a la cabeza de chiquito, algunos recuerdos que quería que me los explicara, algunos temas de la mamá de Selene, mi prima y mejor amiga cuya mamá falleció a los dos años que ella nació. En esta charla, hubo una anécdota que me contó mi mamá me dejó helado: cuando mi hermana era chica, apróximadamente 3 o 4 años, mis viejos vivían en un barrio que recién se estaba empezando a fundar, en una casa muy humilde. Obviamente yo no existía en aquel entonces, después mis viejos se mudaron a lo de mi abuela paterna donde nací yo, aunque a mi mamá no le gustaba para nada vivir ahí. Entonces, cuando yo tenía 4 años, mi mamá me contó que ella y yo habíamos pasado por ese lugar en donde vivían mis viejos y mi hermana, y que yo le dije "Te acordás cuando vivíamos acá". Mi mamá me contó que ella se reía, pero que era imposible que yo viviese ahí porque no había nacido aún. Una de mis tías cuenta que cuando yo era chico, en la revista de Multicanal que llegaba por correo, ella me hacía jugar preguntándome el canal y yo se lo señalaba en la revista aún sin saber leer ni escribir.

A todo esto, hablé por Whatsapp con Selene que hace banda que no hablaba con ella y menos de vernos porque cada uno está en la suya. Si nos veíamos poco cuando ella vivía abajo de mi casa, imagínense ahora. Ya conté que su mamá falleció cuando éramos chicos, y su papá falleció en 2009 luego de que mi tía y mi abuelo paterno fallecieran también. Hizo lo que pudo para salir adelante, ellos son muchos hermanos aunque varios de ellos la hicieron de lado al igual que a su hermano menor, Francisco. Con Selene siempre nos ponemos a recordar viejos tiempos, mi infancia con ella fue increíble, nos conformábamos con muy poco: yo yendo a visitarla y siempre queriendo estar junto a ella. Su papá no la dejaba salir mucho y, hasta le conté que me acordaba cuando mi papá no me dejó visitarla por muchos años y que yo tenía que ir a visitarla a escondidas y con mi vieja que me hacía la segunda. Muchas cosas nos olvidamos o no queremos decirlas, pero empezamos a darnos cuenta que somos grandes y podemos hablar de cualquier tema sin preocuparnos si el otro se va a enojar o no. Seguimos hablando de los recuerdos de cuando éramos chicos, y ella me contestó que yo siempre tuvve los recuerdos palpables, como si estuviesen ahí. No sé por qué soy tan memorioso, a veces se me vienen imágenes que creo que nunca pasaron en esta vida ni en sueños. Le conté mi experiencia con la canción de las Spice Girls, "Mama", que yo antes de escucharla por primera vez o después de varias veces, yo sentía que la había escuchado en una vida anterior. También me reí con Selene acordándonos cuando en nuestra adolescencia nos juntábamos con Rebecca y la acompañábamos hasta afuera para corroborar que entrara a su casa sin problemas. Rebecca y su familia, también numerosa, fueron muy humildes, tenían un portón alambrado y una puerta que era también de alambres. Entonces, un día en plena madrugada no entraba más porque se quedó cerrando con un hilo ese portón y nosotros empezamos a gritarle:
-Dale, negra. Si total a tu puerta pentágono la soplás y ya se cae, ¿para qué la cerrás tanto? - Y nos descostillábamos de la risa. Siempre con buenas intenciones y jamás queriendo herirla en absoluto.

También, vinculando mis orígenes a mi vida sexual, volví al sauna que hace meses que no iba porque tenía la concepción de que "tengo lugar, entonoces ¿para qué voy a gastar plata en lugar para cojer?" Pero últimamente, los chicos en Grindr andan ariscos y son todos perfiles que ya conozco y muchos me conocen de ahí mismo. No hay novedad. Y como ando muy caliente y lanzado, me pareció muy buena idea ir al sauna y tirármele a quien me pareciera lindo. Elías me ofreció salir a bailar, me tiene podrido con que quiere salir a mamarse a Puerca. Ya me cansó ese lugar después de años saliendo: la música una reverenda cagada, la gente es la misma que hace años, la gente nueva no es novedad tampoco, el alcohol caro y encima me aburre y me cansa viajar hasta allá. De todos modos, me convertí en el tipo de puto que juré que nunca iba a ser: el de no salir a bailar y preferir garchar. En fin, termino cansado de laburar y quiero sexo, chupar pija y, si está bueno, tragar leche a full. 

Durante el viaje en tren, me puse a pensar la diversidad de gente que viajaba ahí: familia, muchas parejas de gente grande, algunos hombre mamados a más no dar, otros cansados que volvían de trabajar, gente joven que salía a bailar. En Remedios de Escalada subió un pibe que jugamos a las miradas y, cuando el que estaba parado en frente de mí al lado de la puerta, él se acercó y se puso en ese lugar. Me pareció un poco evidente y me hice el boludo. No había subtes así que me tuve que tomar el 12, cosa que ya había fichado la parada una vez que también creo que fui al sauna. Con ese pibe, salimos juntos de Constitución y tomamos el mismo colectivo. El domingo, me habló por Grindr y resultó que con él nos habíamos hablado varias veces pero siempre llevaba un momento en que clavaba el visto en la conversación. Nos pasamos fotos y ahí quedó todo otra vez. La rutina de tomar algo y entrar entonado al sauna me hacía actuar más liberado, así que me bajé casi una botella de Dr. Lemon solo aunque mucho efecto no me hizo. 

Al primero que agarré era a uno colombiano o por ahí que se la mamé mientras me chupaba el culo y le tragué la leche aunque no quería. Eso pasa porque quieren seguir toda la noche cogiendo a todo el mundo, pero a mí me das la leche o me insultás. Le chupé la verga a uno que medía como dos metros y unos casi cuarenta, aunque prefirió encerrarse a solas con uno de su edad, sin embargo, mi mamada hizo que se le secara la verga onda cuando van a acabar.  Agarré a uno que andaba fumando por ahí, se parecía a Byron y su cara de casi cuarenta también, pero con su cuerpo tonificado, muy deportista. Se la estuve chupando como una hora en frente de muchos, garganta profunda a full a tal punto de sentirme casi afónico durante esta semana. Entramos a un box y hasta me re contra cogió como nadie pudo hacerlo, sin forro y con la verga flácida. Me la chupó y hasta acabé en su boca y se la tragó. Durante el break, me duché y me trajo un Speed para tomar, nos separamos al toque y yo fui a chuparle la pija a uno arriba, él me vio y se fue. Como no me gusta el chabón ese, salí y me lo crucé. Él pensó que lo había ido a buscar, pero en parte tenía razón. Al final, entramos a ese box, se la mamé al tipo mientras él me la ponía. Le tragué la leche al otro. Mientras quedamos ahí, dejamos entrar a un pasivo y se la mamamos entre los dos. Lástima que llegó limpieza y tuvimos que separarnos. Encontré a otro como a los veinte minutos aun cuando dije que me iría a mi casa. Hice lo mismo, se la re chupé y me acabó en la boca. Otro wascazo que tragué.

Volví tranquilo a mi casa, sabiendo que cuando los de Grindr se vuelven ariscos, existe el sauna que conocí allá por 2013 y que me da buenos momentos cuando los necesito y aunque deba pagar. Esta semana vinieron dos: uno que me terminó bloqueando porque yo no era su tipo seguramente, porque quería charlar y yo quería garchar. Y el otro, pasivo, casi se me desmaya por los nervios, aunque hice lo mismo: garchar y después hablar. Lo mío no es charla y sexo, sino al revés. Ahora estoy esperando a ver qué sale, tengo muchas ganas de seguir cogiendo.


F.A.M.