El cuarto día fue más de lo mismo. Nos levantamos, desayunamos en el hotel mientras nos reíamos de la que nos servía el café porque Diego quiso leche y dijo algo como:
-Ay, cierto que a vos te gusta la lechita - Entonces bromeábamos conque la mujer le servía la leche de sus tetas. Luego, fuimos a la misma playa, esta vez estrené mi maya Speedo y toda la gente mirándome; por otro lado, yo re emocionado para que hasta los pakis me miraran. Tomé mucho sol, me había llevado hasta la pincita de depilar, la lima y otros objetos femeninos por si acaso. Resulta que a plena tarde, mientras estábamos tomando sol y haciendo chistes, una mujer de unos 40 años no pudo resistirse y escuchar nuestras conversaciones. Se nos acercó y empezamos a charlar, nos dijo que la playa en donde nosotros estábamos era para familia y que quizás nosotros busquemos otra cosa, por eso nos recomendó la playa contigua a la que estábamos; nos dijo que ella no tiene problemas con los gays porque, de hecho, su mejor amigo es gay y que tiene buena onda con todos.
Nos contó que es de Bs. As. pero tiene una casa ahí en Mar del Plata y que en temporada se viene para vacacionar, que en algún futuro nosotros debemos hacer algo parecido: comprarnos una vivienda para vacacionar, total en épocas donde no la use, se alquila. Lo de ir a otra playa era lo que yo había propuesto antes, pero Chris dijo que no. Chris la rechazó desde el principio a esta mujer, entonces Lautaro empezó a charlar con ella; sin embargo, Diego estaba un poco extraño porque se la pasó tomando sol todo el día sin decir ni 'ah'. Lautaro me decía:
Nos contó que es de Bs. As. pero tiene una casa ahí en Mar del Plata y que en temporada se viene para vacacionar, que en algún futuro nosotros debemos hacer algo parecido: comprarnos una vivienda para vacacionar, total en épocas donde no la use, se alquila. Lo de ir a otra playa era lo que yo había propuesto antes, pero Chris dijo que no. Chris la rechazó desde el principio a esta mujer, entonces Lautaro empezó a charlar con ella; sin embargo, Diego estaba un poco extraño porque se la pasó tomando sol todo el día sin decir ni 'ah'. Lautaro me decía:
-A tu marido no sé que le pasa. Llamalo a tu marido - Y cosas así porque decía que nos veía en pareja y que faltaba la confirmación. Recordemos que Lautaro y Diego no se llevaban bien, pero igual se hablaban. Resulta que mi celular había empezado a andar mal: la batería no duraba nada y quizás cuando quería llamar a mi mamá, se me tildaba. Había empezado a hacer frío cuando el sol se empezó a poner, así que como tenía plata, quise que alguien me acompañara a comprarme otro celular. Chris y Lautaro dijeron que no, que si nosotros íbamos, ellos aprovecharían para bañarse primeros en el hotel. Diego no tuvo drama y me acompañó.
En ese viaje camino al centro de Mardel, hablamos muchas cosas personales... no sé, pegamos muy buena onda con Diego y creo que me veía en pareja con él en estas vacaciones; entonces nos empezamos a contar cosas de nuestras vidas. Ni idea el orden de la charla ni con qué tema surgió:
-Bueno, yo a los chicos los conozco hace como dos años. En realidad a Chris, porque un ex-mejor amigo me lo presentó porque a los dos nos gusta Katy Perry. Y ahí surgió todo. Nunca lo había visto en persona hasta que me separé de mi ex y ahí propuso que nos veamos y tengamos sexo. A Lautaro le hablé esa primera vez, y me contó que vivía cerca de mi casa, así que pegamos buena onda.
-Ah mirá. Yo los conocí por medio de amigo en común a Chris y salimos unas pares de veces de paseo y también pegamos buena onda. Después nos juntamos para garchar los tres, con un poco de 'cosita' pero todo bien - Me respondió Diego.
-Sí. Igual con ellos pasé las mil y una, porque se pelearon varias veces conmigo. En realidad una vez que yo estaba mal por un muchacho con el que andaba, Lautaro me invitó a su casa y tuvimos sexo. Me pidió que le mostrara, como chico celoso, lo que yo hablaba con Chris, y después le dijo que había estado conmigo a solas, y ahí Chris se enojó. Aunque según él, porque yo le mostré mensajes que son entre él y yo. Que tampoco son de contenido prohibido. En fin, después Chris me habló y estuvo todo bien, cojimos por separado, Lautaro se enteró y se enojó conmigo. Después hablamos, sin embargo, cuando apareciste vos, Lautaro también se enojó porque a la salida de Whip le dije "pito corto" y se re ofendió. Desde ahí no nos hablamos hasta ahora - Hubo un silencio - Sí, lo sé, un re puterío.
-Mal. Te pasó algo similar a mí. Igual vos te hablás ahora con él. Yo no - No recuerdo quién fue, si Lautaro o él mismo aquella vez que nos vimos en su casa con Chris, pero Lautaro lo eliminó porque ambos tuvieron un problemita con el ex de Diego. Entonces desde ese momento, Lautaro cortó relación con él. Diego comenzó a hablarme de su hermana, quién es, cómo se lleva con ella y cómo se sintió al estar ella con nosotros. No sé como fue la cosa que hablamos de nuestros ex, y en esta bolsa cayó Martín más que Joel. A la vez tenía miedo de no poder enamorarme de alguien, en este caso de Diego, porque justamente en estos dos años no pude sacármelo de la cabeza a Martín. No obstante, yo miraba a Diego y algo me decía "No sé si estaría en pareja con él". Diego, por un lado, me cuestionaba porqué yo no era capaz de olvidar a ese chico que movió mi mundo, y yo respondía de tal forma que él tampoco se decepcionara si algo entre nosotros no funcionaba.
Seguíamos caminando y ya en el centro, le comenté que estaba yendo a la psicóloga por decisión propia para hablar de temas personales, le comenté sobre mi carrera y sobre mi trabajo, los altibajos que suelo tener. Él, por otro lado, también me contó que fue al psicólogo, que le remarcó que al estar hablando mucho de "Yo", "yo" y "yo", es un poco egocéntrico y hasta egoísta, cosa que eso veía en mí. Para seguir paseando, le propuse ir a comer al McDonalds pero el de la peatonal estaba muy lleno; por eso terminamos comiendo en el Mc del shopping que había a unas cuadras más. Casi me peleo con una chica que trabajaba ahí porque, encima que no había ketchup, me sirvió la bebida en un vaso roto; cosa que tuve que bajar y no me quiso cambiar el vaso, sólo me dio uno vacío. A Diego le molestó que yo hiciera lío y hasta se malhumoró quedándonos a veces en silencio por el orgullo de los dos. 
Esa tarde, al volver al hotel, nos bañamos. Una de las críticas que me hacía Almeyda - como empezamos a llamar a Diego hacía tiempo - era que yo era muy fanático de Madonna; y a la hora de entrar a bañarme, hasta que no salía, no paraba con ella. Los chicos propusieron ir al Havanna a tomar algo mientras planeábamos la noche, así que para allá salimos. Almeyda se estaba quedando sin plata, por eso empezamos a dividir los gastos y poner una parte entre Chris, Lautaro y yo. Al volver al hotel, decidimos quedarnos porque hacía frío, Diego estaba raro, se la pasó en su cama con su celular y no me dio pelota. No recuerdo qué estábamos hablando pero no me prestaba atención, la cosa que pasé a la habitación de los chicos y mientras estaba Lautaro sentado, le dije:
-Ay boludo, me vengo para acá porque hay mucha mala onda allá. Prácticamente estuve hablando con la pared, así que me parece que va a ser mejor que cambie de habitación con ustedes - Lo tiré como chiste, nunca pensé que esa frase haría que todo estallara entre Diego y yo. La cosa que propusimos ir a tomar mates al comedor del hotel, pedimos permiso y a la hora de irnos, entro a nuestra habitación a buscar algo y Almeyda me dice:
-Boludo, si tenés algo para decirme, decímelo en la cara. Porque te escuché lo que le dijiste a Lautaro.
-¿Qué? - Fue lo primero que le pregunté - ¿Qué cosa le dije a Lautaro? ¿Lo de que estuve hablando con la pared? Si es verdad. No sé qué te pasa pero desde ayer que estás raro, en la playa estuviste con cara de culo sin decir ni 'ah', y ahora te estaba hablando y no me dabas pelota.
-Eso no tiene nada que ver, si no quiero hablar, no quiero hablar y punto. Pero no me gusta eso que vayas allá para hablar mal de mí.
-Pará, ¿en qué momento hablé mal de vos? Si lo dije al propósito, Diego, para que vos escuches. ¿No ves que estaban las puertas abiertas? Me parece cualquiera.
-No me gustan esas actitudes de orgulloso y engreído tuyas, que vayas allá y digas eso.
-¿Qué? No, boludo. Estás diciendo cualquiera. No sé que te pasa a vos. Y no vengas con boludeces porque el problema lo tenés vos. Y no quiero discutir más por algo tan boludo, así que cortémosla ahora y listo. Vos seguís en lo tuyo y yo en lo mío - A todo esto Chris y Lautaro se habían quedado mirando la situación como sorprendidos desde la puerta de nuestra habitación. Agarré mi computadora, mi nuevo celular y salimos para el comedor, cosa que
Diego se negó a ir con nosotros y prefirió quedarse encerrado ahí con su celular. Al llegar al comedor, empezamos a cuchichear como viejas del barrio con Chris y Lautaro sobre lo que había pasado recién, y ellos también lo notaban raro. Chris aflojó y le mandó un mensaje al whatsapp para que viniera, pero no hubo caso. Lautaro se ofreció de mediador y fue a hablar con él para ver qué pasaba. Mientras Chris tomaba mate y yo me comía unos alfajores "Havanna" con gaseosa, comentábamos acerca de detalles que sucedieron entre ellos: Lautaro-Chris-Diego, actitudes de chiquilín de Diego y su relación su ex-pareja. Cuando volvió Lautaro después de 20 minutos, donde me imaginé cualquier cosa, vino con malas noticias: Diego estaba raro porque su hermana le delató que la primera noche yo no estuve en mi cama, y que cuando ella fue al baño, escuchó ruidos raros en la habitación donde estábamos los tres. Y además, estaba enojado por lo que yo recién le dije, siendo que habíamos pasado una linda tarde juntos, y como se estaba enamorando (esto lo pienso yo), cualquier palabra fuera de lugar podría dolerle. Chris procedió a hablarle por wpp, la cosa era que había que negar a muerte que nosotros no hicimos nada esa primera noche, cosa que sí hicimos. Diego Almeyda aflojó pero aun así no quiso venir a tomar mates en la noche. Al volver a la habitación, estaba todo apagado, así que sin ganas de encender chispas, me acosté a dormir.
Al día siguiente, no me levanté para desayunar, me quedé durmiendo un poquito más. El amigo de Lautaro con el que habíamos estado hacía unos pares de días en la playa, iba a volver a pasar la tarde con nosotros. Ese día me tocó pelear con Lautaro, adelanto. En el colectivo, Diego se hizo el rebelde, se durmió y se le cayó el celular cosa que hizo un ruido que todos miraron. Al llegar, habíamos ido a comprar facturas en la panadería que se encuentra frente a Playa Grande con Lautaro y el amigo. Cosa que ahí Lautaro tiró un comentario que no me gustó para nada, y volvimos a tener un roce como aquel que tuvimos al salir de Whip el día que festejamos el lanzamiento de 'Prism' de Katy Perry. Me dijo algo así como que mi marido andaba raro, que le ponga los puntos, que igual él lo conocía y sabía como era, que ya se lo había comido y que me dejaba las migas a mí. Yo estallé y le contesté:
-¿Decís eso por algo en especial? ¿Porque me está dando bola a mí y no a vos? Vos ocupate de Chris que es tu pareja, ¿o te vas a poner celoso como cuando te ponías en aquellos tiempos que yo hablaba con él y a vos no te conocía? - Nada, chispazo. Pero el día continuó bien. Hablé con Almeyda esa tarde, de a poquito reconstruíamos la conversación pero yo le pedí que cambie su actitud en la playa. Y así fue como cambió. La tarde la pasamos con risas y charla entre todos, aunque Lautaro andaba con aires de diva de Av. Corrientes. A la noche, con Lautaro habíamos ido a comprar la cena en una rotisería que había a unas bastantes cuadras de nuestro hotel y nuevamente tuvimos un encontronazo. No sé que me dijo pero se estaba burlando, por eso le respondí de mala que se callara porque me estaba haciendo enojar. Lautaro aceptó; sin embargo, después me hizo unos chistes como para calmar las aguas. Era momento que dejara de ser tan cínico conmigo, me hacía pensar que no había sido buena idea ir de vacaciones todos juntos.
Si mal no recuerdo, a la hora de dormirnos, nos encerramos con Diego en la habitación y nuevamente tuvimos sexo desenfrenado con toda la química y física que podíamos tener. El hijo de puta con la buena verga que tiene, me hacía dilatar muy rápido, y me hacía disfrutar de la penetración a pelo sin preocupaciones. Así que yo estaba chocho porque le chupaba la chota con tantas ganas a él que, en momentos de calentura, le dije que lo amaba. Recuerdo que le pedí la lechita en la boca y me la tragué como demostración de total entrega hacia él.
F.A.M.
