Hace apróximadamente dos meses que un chico me habló en Grindr mientras yo estaba trabajando en pleno Lomas de Zamora. Lógicamente, en esta aplicación, tengo ciertos requisitos porque, como sabrán, no cualquiera es mi target. Detesto a los viejos que le gustan los "twinks" por más que haya estado con Santiago y con Alejo que rondaban casi los 40 años. Pero no lo aparentaban ya que no tenían barba ni canas, y tenían un cuerpo marcado. Si vos a estar en estas redes sociales donde yo sí muestro mi cara y digo mi rol, prefiero encontrar a chicos de mi edad. Este chico que me habló sólo con foto de lomo, me gustó mucho, después me pasó una foto de su cara y me gustó más. Me dijo que se llama Imanol pero, lo que más llamaba la atención era que él era de Tandil. O sea, ¿cómo puede llegar Grindr a una distancia tan amplia como de Lomas de Zamora a Tandil. Hay casi 200km de distancia. Es evidente que allá no debe haber muchos gays; sin embargo, gays de pueblos aledaños deberían aparecerle y no yo, que soy de la ciudad.
Estuvimos hablando y pasándonos fotos de cara: a mí me gusto. Él tenía 19 años, pero era de otro pueblo, en Tandil estudiaba. A su vez, me contó que yo parecía más chico que él a pesar de mis 22 años, que nunca estuvo con chicos y que se considera bisexual, que él único que le pareció lindo fui yo. A los días, terminamos agregándonos a whatsapp y charlando por ahí. Imanol siendo un chico cuasi-paki, a mí me ponía la pija dura y el culo dilatado... ese toque masculino y de abdomen plano me hacían volar la imaginación e ilusionarme en encontrar 'ese' que tiene el cuerpo que a mí me enamora. Nos mandábamos audio y, cada día por medio, hablábamos a full con alguna que otra foto espontáneo de por medio. Los únicos momentos que no me hablábamos eran los fines de semana porque él estaba con sus compañeros de hostel, y yo de gira con mis amigos. Es más, ese fin de semana largo que yo estuve con Lion garchando a pleno, agradecí no haber hablado con él porque significaba optar o por Lion o por Imanol. Los días pasaron y yo ya lo trataba cariñosamente con palabras como 'cielo', 'amor', 'mi vida' y demás que, aunque podrían asustarlo, lo hacía con doble sentido: con humor y con verdad. Imanol es de pocas palabras porque no tiene experiencia con hombres, pero creo que pegó en el palo y yo soy lo que él necesita para entrar en el ambiente. Quién sabe, y por ahí terminamos juntos, lástima la distancia. Casi llegando a mitad de julio, le tiré la idea de vernos siempre y cuando él esté dispuesto a que yo viajara y pasar unos días en un hotel conmigo, además de pasear juntos. Si él no tenía plata, yo pagaría todo, y no es la primera vez que lo fuese a hacer, sobre todo porque él vive en un hostel y no se permiten visitantes. Como no se animó a confirmarme lo que él quería, todo quedó en stand-by y, en las vacaciones, perdimos contacto.
Tras la última cancelación a Chris para ir a Amérika, me volvió a invitar a Whip un viernes para desconchar y terminar en el túnel. Esta vez, acepté porque no tenía compromiso alguno y propusimos encontrarnos para hacer previa aunque era barra libre. Él vendría solo porque su amigo trabajaba y no quería salir para después ir amanecido. Era una noche fría, recuerdo haber recorrido los alrededores de AMK porque no encontraba cajero con plata. Le confirmé que había llegado pero él estaba retrasado. Igual, al llegar, nos quedamos un rato afuera hasta terminar de tomar, pero lo más raro que pasó en ese intervalo de espera fue que vi a un conocido del trabajo y me pregunté si era él. La fila se hizo larga, lo vi a Javier delante de mí pero ni lo saludé, lo peor fue que con Chris empezamos a hablar de mi ex y mucho no quise hablar ya que Javier es el único amigo en común en Facebook que tenemos; sin embargo, ni se conocen, tampoco sé si Javier se acordará que él es mi ex. Entramos con Chris y empezamos a tomar, anduvimos por Whip, aunque los tragos que nos gustaban los servían en AMK. Entre esos chicos, vi a uno que era re pasivito como yo y que, hace muchos meses atrás cuando yo recién me había separado, se prendió a chupar la misma pija que yo en el túnel y compartimos la leche que nos habían dado en la boca. Como era morboso como yo, le dije que se tomara mi leche, por eso le acabé en la boca y se la tragó toda sin desperdiciar nada. Tampoco creo que se acuerde de mí, sí del momento. Había muchos pendejos lindos, uno que se dibujó bigotes de gatitos me volvió loco, pero no se fijó nunca en mí sino en otro pasivito más chiquito y pendejito. Tiempo después, me lo empecé a cruzar en Grindr aunque nunca concretamos nada.

Optamos con Chris ir a la parte de AMK y tomarnos el Dr. Lemon con Mojito que servían en la barra de abajo del túnel. Fue ahí cuando me lo cruzo de frente a este compañero y me quiere saludar, obvio que me hice el desconocido; no obstante, pasó toda la noche cerca de nosotros y, su amiga contándole lo que nosotros con Chris hacíamos. Y Chris lo mismo conmigo. Entre esos momentos de éxtasis mientras estábamos en las escaleras de la parte izquierda del escenario, veo una figura familiar:
-Ese chico es un conocido mío - Le mencioné a Chris quien giró su cabeza apenas para ver pasar por atrás de nosotros a alguien.
-Apa... está lindo - Era Daniel Terra. Entonces, lo toco por atrás y nos saludamos. Daniel Terra está muy cambiado hace ya mucho tiempo. Como conté anteriormente, desde que se hizo periodista, se arregla más y ya no tiene esos rulos tan feos, y ahora tiene un brillo en sus ojos que le resalta más ese color azul que tiene. Él casi ni me dirigió la palabra porque quizás piensa que yo lo voy a querer besar como pasó hace poco menos de un año o, por ahí, se manda la parte por ser 'cuasi famoso'. Recuerdo que bailamos con Chris en la pista y, hasta por error, casi nos damos un beso,
yo siempre le preguntaba si se me marcaba el culo con el pantalón que tenía puesto.
Inconscientemente, yo quería que Chris me mirara y me tocara. Cuando la borrachera me pegó, subimos con Chris al túnel y, no recuerdo bien qué pasó esa noche, sé que chupé pija y me acabó uno en la boca, manoteé bultos a full pero, en un momento, entre dos me querían dar. Ebrio, pude reconocer a uno de esos que me agarró porque me tenía ganas desde el día que lo conocí. Ahora no recuerdo como tenía la pija, por ahí valió la pena chupársela en el túnel. Su nombre era Luis, y conté algo en el capítulo 'Hermoso Desconocido' sobre él y el otro chico llamado Pablo, a quien nunca más volví a ver. Igual fue hace muchos años. Cuando estaba en pleno goce de chupada de pija con uno, encienden las luces y no quedó otra que apurar el trámite y acabarme en la boca lo más rápido posible.
Tomé la leche de un solo trago y me dirigí hacia la salida del túnel para encontrarme a Daniel Terra en el camino. Puse mi brazo alrededor de su nuca:
-¿Qué onda, chabón? - Le dije con un olor a leche en mi boca.
-Nada, acá. Disfrutando la noche. Cansado de tanto laburar.
-Y sí ¿no? Pero bueno, otra no queda en este país - Acoté yo de lo ebrio que estaba. Otra vez, Daniel Terra tira como excusa que estaba con mucho trabajo, sin tiempo y bla bla bla. Me parece que, esa vez que yo le corté el rostro porque me dijo en pleno boliche que se hablaba con mi primer ex, le dio por las pelotas y por eso también nunca nos volvimos a hablar. Al bajar del túnel, mi compañero me ve bajar con Daniel Terra y tuve que saludarlo porque ya era muy evidente, lo hice con mi mejor cara de culo. Terminé esperando a Chris afuera para retirar mis cosas de su mochila y me contó que, después del túnel se fue al baño a seguir la joda. A la salida, mientras iba caminando como en los viejos tiempos hasta Av. Pueyrredón y Av. Corrientes, fui abriendo Grindr en el camino hasta que un muchacho me habló. Me dijo que se llamaba Adrián y que vivía en Almagro, que cuando quisiera vaya a visitarlo. Entre fotos y fotos, me envió de cara, pero en las sombras no dejaban apreciarlo muy bien. Me envió fotos de su pija también, aunque noté que no era la gran cosa. Nos pasamos whatsapp y hablamos durante la semana y me preguntaba cuándo lo visitaría.
Durante la semana, hablé por Grindr con otro pibe que me sacó charla hacía unos meses pero no habíamos quedado en nada, sobre todo porque le pregunté que rol era y me contestó que no tenía drama con ser uno u otro. Aunque, bueno, como yo soy solo pasivo, no quería que me salga con un martes 13; entonces todo quedó ahí. Esta vez, me habló y ya quiso que nos veamos. Acordamos días libres y propusimos el sábado porque los dos lo teníamos libre, además no vive tan lejos de mi casa. Chris nuevamente me había propuesto salir a bailar pero esta vez ese sábado. Su cumpleaños pasó y, tras saludarlo, me dijo que estaba contento que nos sigamos hablando y más seguido que nunca a pesar de las cosas que sucedieron en estos casi 5 años que nos conocemos, creo que ninguno de los dos imaginó que pasaríamos a ser algo así como amigos cuando, en realidad, pensábamos ser un encuentro de una noche y listo. Esta vez, su amigo y compañero de salidas iba a venir con nosotros.
Esa tarde, antes de Amérika me vi con este pibe que llevé a mi casa, que parecía lindo y más bajo de estatura, pero me llevé la sorpresa de todo lo contrario: era alto y, en las fotos, salía muy perfecto, pero nada que ver. Lo esperé en la parada del colectivo y vinimos caminando juntos, juré conocerlo de Plop/Puerca, y después se lo dije. Él no me reconoció pero yo sí. Llegamos a casa y justo, antes de entrar, veo a algunos familiares pero nada, que piensen lo que quieran. Entramos a mi casa todo acomodado como nunca para la ocasión y, tras dejar de fondo un recital de Mylène Farmer, me senté en la silla de oficina. Él se acercó y ya me besó de una, a lo que yo quería ir tranqui, pero bueno, ambos sabíamos a lo que veníamos. Enseguida lo agarré de la mano y lo llevé a mi cama para matarnos a besos, así que él empezó a tocarme el culo, a meter mano por debajo el pantalón y yo a tocarle el bulto. No tenía una pija descomunal porque apenas tenía 20 añitos pero se defendía bastante bien, sus ojos me demostraban una tristeza increíble, como si estuviese bajoneado, pero no quise preguntarle en esos momentos. Me hizo sacar el pantalón y quedé en bóxer, me senté arriba de su pija mientras nos comíamos la boca. Se lo sacó él y quedó en slip 'Lody' y, mientras se la masajeaba, nos besábamos. La peló y se la chupé un rato mientras él suspiraba, como siempre me la metí hasta el fondo con arcadas y lagrimeo de por medio. Con nuestros pelos hecho un desastre, me chupó el culo y jugamos un rato con su pija en mi agujerito que ya por poco entraba toda. Se puso el preservativo mientras se la chupaba y me cojió un rato, me senté arriba de su pija para cabalgar entrando toda y haciéndolo ver las estrellas. Lamentablemente, mucho no aguanté, por ende seguí chupándosela y me acabó en la boca. Fui al baño a escupirla y quedamos hablando un rato sobre nuestros planes a la noche. Lo acompañé a la parada, ya era casi de noche y algunas partes sin luz, hacía mucho frío.
Una vez que llegué a AMK, los esperé un tiempo en los alrededores hasta que llegaron, hicimos previa y llegó un momento que el alcohol nos pegó rápido, tanto que empezamos a reírnos y hablar boludeces, como por ejemplo, si alguna vez nuestros padres nos descubrieron en alguna situación gay rara. Además, les confesé que un chico había venido a mi casa antes de salir a bailar. Conté hechos de mi adolescencia con mis primos que se me vinieron a la mente, aunque lo mejor fue escuchar los relatos de ellos dos. Vimos que la fila comenzó a llenarse y supimos que íbamos a tardar en entrar; no obstante, un muchacho se nos acerca y nos propone entrar con él por lista de cumpleaños, supongo que completar los ocho invitados y que uno entrara gratis. A nosotros nos re convenía porque casi no hacíamos fila y pagábamos menos. Hace años que yo no iba un sábado, sobre todo por lo caro que estaba. Hicimos algunos chistes y entramos. Adentro tomamos, bailamos, quisimos terminar mal para entrar al túnel y hacer desastres, y la cosa era como yo pensaba: el túnel no iba a estar tan lleno un sábado. Son días y días en los que los chabones están con más ganas o van a histeriquear ahí adentro, esta vez estaban todos ariscos. Yo tocaba bultos, me lo tocaban pero, como yo soy pasivo, no se me paraba. Chupé alguna que otra pija aunque nadie quería acabar, y el que agarraba una pija no se la convidaba a nadie... muchos pasivos para pocos activos.
Llegó un momento en que me cansé y me senté, eran como las 6.30am y un pibe se me acercó y me puso la pija en la boca. Como yo ya estaba sin ganas de nada, se la mamé y una flor de poronga se erectó. Me preguntó si me podía acabar en la boca y le dije que sí, dejé de chupársela para tenerla en mi boca y sentí el bombeo increíble de su verga soltando toda la leche. Me la tragué. Me acarició la cabeza y se sentó a un lado no sin antes preguntarme si me molestaba:
-Qué lindo chico que sos. ¿Qué hacés acá? - Me preguntó.
-Gracias. Lo mismo que vos, supongo.
-¿De dónde sos?
-De lomas.
-¿Posta? ¡Yo también! Qué casualidad ¿Puedo quedarme acá con vos? - Me dijo y le contesté que sí. Charlamos un rato acerca de dónde vivíamos y me contó que conocía mi zona porque, lógicamente, vive cerca. Nos besamos un buen rato entrecortadamente mientras tenía su brazo alrededor de mi nuca, y me preguntó si yo le gustaba.
-Sí.
-¿Seguro? Capaz no me viste bien por la oscuridad.
-Sí, me parecés lindo. Sino, no me hubiese tragado tu leche.
-Qué hijo de puta, ¿te la tragaste? Pensé que la escupiste.
-No - Le respondí y nos quedamos así hasta que ya era hora de marchar. Él era morocho, de 26 años que no los aparentaba, me comentó que estaba con unas amigas y que debía esperarlas, yo le dije lo mismo pero, al bajar, lo encontré a Chris sentado ya con su mochila y esperándome a mí. Me vio acompañado y le dije que me volvía con este chico, así que nos despedimos. En la fila del guardarropas, él encontró a una chica y a una cuasi-trava; yo solo con cara de cansado atiné a esperarlo. Salimos y nos moríamos del frío, él saludaba a quien se le cruzaba, si no me equivoco era el día más frío del año, nosotros caminamos hacia Av. Córdoba y ahí abrió las puertas de su auto. No sabía que tenía auto, pero mejor así no nos congelábamos y, mientras esperábamos a que lleguen las amigas, me comentó que él siempre venía los viernes y los sábados a AMK y no era de salir a otro boliche.
Yo imaginé que pronto nos quedaríamos los dos solos, y que yo llegaría a mi casa sin tener que fastidiarme por viajar en colectivo en un día tan frío como aquel. Pero me equivoqué en las dos. Él llevó casi hasta sus casas a cada una de las chicas porque vivían por Lugano, y entonces nos quedamos los dos solos en el auto, pero me trajo hasta mi casa y me preguntó si podía entrar. Realmente me tomó de sorpresa, pensé que me iba a dejar en la esquina y hablaríamos luego. Tengo que admitir que, en más de una ocasión, desconfié porque tomó caminos innecesarios como la villa Zavaleta y la parte fea de Pompeya, como lo es la terminal de los colectivos 44 y el 76. Obviamente, después de que me trajera a casa, no podía negarle entrar sobre todo porque hacía mucho frío. No sabíamos como estacionar el auto porque lógicamente había un negocio en la parte de adelante de mi casa y no queríamos estorbar. Cuando yo bajé, me ve mi prima y fue un quemo bárbaro. Entramos y lo primero que hicimos fue acostarnos en bolas aunque tapados hasta la cabeza y temblando del frío, la estufa estaba prendida, pero no ayudaba.
Nos besamos un rato e hicimos cucharita, su pija se puso dura como una piedra y quiso intentar ponérmela:
-No creo que sea buena idea porque hace mucho no cojo y me va a doler - Le dije de antemano, sin contarle que ayer a la tarde otro me había cojido.
-Probemos, dale. No te va a doler.
-No, en serio.
-Pero yo quiero, dejame intentar al menos. La puntita, y vas a ver que después no duele más.
-Fijate, pero va a ser imposible ahora - Me puse boca abajo y él empezó a presionar su verga para metérmela aunque yo tenía razón, no iba a entrar porque dolía un poco. Yo me movía de acá para allá porque me sentía realmente incómodo - Ey, basta. Pará, mejor dejemos acá porque no voy a poder.
-Yo quería cojerte.
-Bueno, será en otro momento - Le dije dándole a entender que si él vino para eso, había sido en vano. Se decepcionó un poco, pero quiso que se la chupara. En pleno acto mientras yo estaba debajo de las sábanas, escucho que me llaman desde afuera y supuse que era por el auto mal estacionado. Vergüenza total que tuviese que bajar este pibe a correr el auto frente a mis familiares, igual mucho no me importó. Le presté un pantalón para que bajara y subiera rápido, y así continuábamos. Me daba aire al levantar las sábanas porque ahí abajo no había oxígeno, se la chupé como por quince minutos hasta que acabó adentro de mi boca y me la tragué toda otra vez. Se la dejé seca y limpia. Cuando nos dimos cuenta, quedamos dormidos casi abrazados, pero el calor de la estufa nos estaba haciendo transpirar y dormir incómodos, por eso me levanté y la apagué.
Alrededor del mediodía, él se despierta y se mueve para todos lados sin dejarme seguir durmiendo. Me dijo que era un poco tarde y que debía irse, a lo que yo le respondí que sigamos durmiendo, total, no había nada que hacer. Continuamos un rato acostados hasta que le masajeé la pija y nuevamente quiso que se la chupara, esta vez, se pajeó sentado arriba de mi pecho y me tiró la leche en la boca que tuve que tomarla en dos tragos de lo mucho que era.
-Puaj, qué asco - Dijo él pero a mi me encanta tragar el semen. Ese día, las cosas terminaron ahí, se llevó mi pantalón y dijo que era cómodo y calentito, que pronto me lo devolvería. como dejando dicho que habría una nueva visita.
Al día siguiente, noté que él me llama al whatsapp a la noche y estuvimos hablando como una hora y media. Me daba cosa cortarle, el tema era que yo estaba haciendo otras cosas. Hablamos de muchos temas y me dijo haberme sacado la ficha sobre cómo yo soy: celoso, posesivo y hasta un poco agresivo. Me dijo que vio ciertas actitudes cuando yo lo acompañé a retirar sus cosas al guardarropas de AMK el sábado. A lo que yo le contesté que nada que ver porque estaba cansado y tenía frío ahí mismo. Le pregunté cuándo nos volveríamos a ver, y él en la semana no quería verse conmigo porque se levantaba temprano para ir a trabajar. Él me contó que nunca estuvo en pareja y que no sentía necesidad de estarlo, yo le respondí todo lo contrario: que si había estado, pero ahora no estaba en un momento de querer estarlo. El martes también me llamó, no lo atendí de una porque estaba haciendo cosas, a lo que me reprochó por qué no le contestaba. Hablamos y me contó una situación insólita que le pasó con una mujer y su auto cuando salió a comprar. El miércoles también me llamó aunque me había cansado y no le contesté, más tarde hablamos por mensajes de whatsapp y me preguntó cuándo nos veríamos porque "quería hacerme el amor", y ahí lo frené:
-¿Hacer el amor? El amor yo lo hacía con mis ex novios nada más.
-¿Y conmigo no lo querés hacer? Yo sí quiero hacértelo.
-Me parece que te estás confundiendo. Creo haberte aclarado que no quiero nada serio con nadie en estos momentos.
-¿Y conmigo qué querés entonces?
-Sexo. Eso es lo que yo busco ahora - Terminé diciéndole porque era la verdad. No me gustó el término 'hacer el amor' porque, si algo me enseñó mi último ex novio es que solo el amor se hace cuando vos estás enamorado de alguien. Ahí la cosa quedó tensa y, al día siguiente, me habló al whatsapp, pero no le contesté. Los días fueron pasando y lo fui ignorando sin clavarle el visto, me llamaba al whatsapp aunque ya me había hartado. Un día exploté y lo bloqueé porque se había vuelto pesado, justo el día en que me preguntó porque ya no le hablaba ni respondía nada.
F.A.M.