No me pregunten cómo pasó. Pasé de hacer tríos con distintos chicos en menos de una semana a tener algo serio con alguien. Estuve con Ken, un chico rubio, de ojos claros, muy parecido a mi chico ideal, del que ya había hablado anteriormente. Estuve con uno de acá unas cuadras que lo vi hace bastante, pero concretamos hace poco porque no le pasaba fotos en bola por Grindr y me bloqueaba. Este chico lo apodé "Ken" al otro con el que hicimos trío. Estuve con el paraguayo, con quien la última vez que estuve con él también hicimos tríos. Aunque era su primera vez, estuvo nervioso y anteriormente ya había acabado. El otro que vino estaba bueno, tampoco era otro Ken ni mucho menos. A éste le hablé dos veces más desde aquella vez que estuvimos y me terminó diciendo ambos veces que ya tenía arreglado para estar con otro. Entonces, le contesté que no me servía para nada tenerlo entre mis contactos si cada vez que le hablaba me iba a decir que estaba esperando que le contestara otro con el que había ya quedado. Es la verdad. Me da cosa perder el contacto con Ken porque me re gustó. Con Byron pasó lo mismo, ahora perdimos el contacto ya que cerré Grindr y no nos tenemos en ninguna otra red social. Estuve con otro chico que es musculoso, que me ató y me vendó. Estuve dos veces y la pasamos bien, seguramente pierda el contacto. Nicolás vino la última vez entre semana y minutos antes había estado con uno de Grindr re flaco y pijón, pendejo venezolano y me encantó como habíamos garchado.
También, es probable que pierda el contacto con el blog y con ustedes. Ya vengo colgando hace bastante por cuestiones laborales y por cuestiones de estrés. Sin embargo, cuando me pongo en pareja, suelo mantener este blog en la clandestinidad por cuestiones obvias. Eso que con Ian estuvimos bastante tiempo y jamás le mencione algo al respecto. Por eso, me hago un tiempo ahora para contar quién es y de qué se trata esto. Lo había conocido por Grindr (qué raro) y hablamos un toque hasta que nos pasamos whatsapp. La seguimos por ahí, pero después lo terminé sacando de mis contactos porque habíamos colgado y me parecía que ni para un garche iba a servir. Me volvió a hablar otra vez y acordamos, previo a eso, en una conversación por Whatsapp, nos dijimos que ambos queríamos algo más serio. Entonces, al conocernos, fuimos por ese camino. Esa primera vez, no fue la mejor. Si bien estuvimos re acaramelados, a la hora del sexo, me la hizo difícil para meter mi mano adentro de su pantalón. No parecía que la tenía grande y me empezó a generar dudas. La pasamos bien igual, no hubo penetración. Nos seguimos hablando durante la semana y nos volvimos a ver al finde siguiente. Y ahí cambiaron un poco las cosas. Ya hubo química y su pija se "alargó" al parecer.
Es un chico alto y flaco como a mí me gustan. No es dotado y eso me la baja un poco. Labura de lo mismo que mi último ex y eso me hace repensar muchas cosas como si yo tengo un imán para atraer a ese tipo de chicos. Eso dicen y lo comprobé este último tiempo con varias personas que me dijeron que suelen atraerles determinado tipo de hombres. También se me vino a la mente que al laburar en el mismo rubro, podrían conocerse. Entonces, esta semana que pasó, lo busqué entre sus seguidores y no apareció. Pero hace un rato, por Grindr localicé si él podía estar conectado por Varela y me apareció Ian. Su Instagran estaba en la descripción y el nombre no era como yo pensaba. Entonces volví a buscarlo entre los seguidores de Tobías (de ahora en más) y sí se tenían. Estallé de la bronca. No porque se tuvieran porque Ian se convirtió en una máquina de hacerse ver después de habernos separado. De hecho, con Lion pasó lo mismo hace dos años y solito Ian lo eliminó de sus seguidores después de vernos en una foto juntos. Me molestó porque las redes sociales y el celular son un tema con Tobías. Es el típico puto que tiene seguidores a rolete (igual que Ian ahora) y en Whatsapp le hablan hasta contactos que no tiene agendado. Si quiere algo serio, también tiene que aflojar con eso. Mi única fuente de charla con otros era Grindr, pero ahora que no lo tengo y él tampoco, se me es complicado charlar con "desconocidos". Le dije que a mí no me habla nada por Whatsapp ni por Instagram, así que yo exijo lo mismo de su parte, que lo solucione. 
Con respecto a mí, no sé si lo que quiero es volver a ponerme en pareja. Me pasó con dos chicos: con Tiziano y con el que buscaba un lugar para quedarse pero que me celaba. O sea, empiezo a ver en peligro mi libertad y me tiro para atrás, me invade la duda y las ganas de estar con otros. Es que hace 3 años que tengo Grindr y este último año se me volvió una adicción. Ahora me pasa lo mismo, siento ganas de estar solo a veces. Estar con alguien en casa me imposibilita a hacer todo, tengo que estar preguntando o congeniando o poniéndome de acuerdo para hacer ciertas cosas. O soy tan colgado que me gusta estar todo el momento acostado y abrazado. Entre otras cosas, pensé que yo podía cambiar, y ciertas actitudes no me gustan de mí. No quiero repetir lo mismo que en mi última relación: los celos, la desconfianza, y en parte la inseguridad. Quería estar con alguien en donde esos sentimientos no estén presentes. Creí que estaba preparado, pero no. No obstante, me dí cuenta que no depende de mí sino del otro. El otro me dice algo y yo compruebo que no es así y ya empiezo con la tercera guerra mundial, me desquicia. Con Tobías, mientras nos pajeábamos con nuestras pijas juntas, hablamos de un "tercero" para tener relaciones. Y en ese sentido sí cambié, soy más mente abierta que hace años atrás. Tiene que ver con Grindr, los tríos, que todos están con todos, entonces le dije que no me molestaba compartirlo a él, pero quiero que él también sepa compartirme. Después me cambió la respuesta diciendo que incluir a otro es para líos, que a él ya le pasó, que después se buscan por atrás y hay infidelidad. Eso es verdad, fui el tercero de muchas parejas gays y siempre me han buscado por atrás, todas. Si nosotros nos dejamos llevar solo en el momento y después volver a ser nosotros, creo que puede funcionar. Mientras tanto, prometo intentar cambiar y cambiar al otro, y ser paciente para que la relación fluya lo mejor posible.
F.A.M.
