Tuvimos una fiesta de disfraces para Halloween. Mauricio tenía ganas de que nos disfrazáramos de una celebridad mujer, previa seguramente en lo de Nazareno y después boliche, Plop más precisamente. Las cosas con Mauricio estaban difíciles ya que en varias ocasiones se ponía en papel de anfitriona de la fiesta y quería hacer y deshacer a su gusto, y las cosas entre nosotros nunca fueron así. Nunca hubo que mandara o diera directrices cuando todos tenemos personalidades fuertes, pero sabemos que nadie manda a nadie. Una vez que estábamos en en su casa haciendo previa, le pedí la planchita y me contestó mal diciendo que estaba bien y no hacía falta seguir retocándome. Y otra vez me contestó mal cuando le pedí el arqueador de pestañas y me dijo que yo siempre estaba pidiendo algo a la hora de la previa, que no había una noche en que yo no pidiera nada. Entonces le contesté que yo venía de lejos y encima temprano para poder hacer previa en su casa donde él no tiene que moverse, y que yo soy así, que siempre tengo que estar impecable. Diferente sería si vamos a su casa y lo pasamos a buscar y nos vamos ya que yo vendría directo y preparado de mi casa. Le contesté a Mauricio que no iba a ir si se hacía en lo de Nazareno, pero me insistió tanto diciéndome que sería la última joda que acepté.
Ese día nos preparamos en casa de Nazareno junto a él y su amiga y nos fuimos a Recoleta a sacarnos unas fotos con todo el mundo viéndonos. En la fiesta había gente nueva y gente conocida. Pero nuevamente hubo situaciones raras que nos llamaron la atención: el alcohol se acabó cuando teníamos que subir al partybus, y encima Nazareno alquiló partybus de sorpresa. Entendí tiempo después y lo compartí con mis amigos que Nazareno tiene un complejo de sentirse inferior y siempre quiere quedar como 'el mejor amigo' porque nunca tuvo amigos, historia muy parecida a la de Gabriel. Sin embargo, siempre nos quedaban dudas con respecto a la plata que le dábamos y al alcohol que nunca alcanzaba. Ese día terminamos súper en pedo, a mi se me habían roto las botas que eran de un amigo de Nazareno, anduve en patas en el boliche o sino era quedarme sentado y amargado. Yo no entendía mucho el lugar al que habíamos ido, me acuerdo que chapé con una pasiva y ahí quedamos, quebrando en Mc de Puerto Madero a la salida que llegamos caminando desde el boliche ese. Acá sucedió otra actitud de Nazareno que no nos gustó: él como no quería esperar a las 8am a que abriera, se tomó un taxi y algunos lo siguieron, entre ellos Elías que había dejado las cosas en su casa. Jamás preguntó ni nada por el estilo.
Eso también sucedió en el día del cumpleaños de Agustina en diciembre quien nos había invitado luego de atravesar una época en que solo nos frecuéntabamos en el boliche. Voy a contar qué pasó durante este tiempo con ella. Resulta que ella se ponía de novia y no le duraban mucho las parejas porque ella se ponía en pedo en el boliche y hacía cualquiera, fue así que se puso de novia con una piba y se rescató. Esa piba era amiga del colombiano, ex de Mauricio. Agustina se separó y quedó como mejor amigo del pibe este, por lo tanto, cuando salíamos a bailar tiempo después de la separación definitiva de Mauricio y el colombiano, era obvio que si nosotros invitábamos a Agustina, el colombiano vendría. Por lo tanto, dejamos de frecuentar con Agustina porque para Mauricio no era sano que apareciera el ex novio todas las noches de boliche. Ella nos invitó a su cumpleaños y decidimos ir porque tanto Mauricio como yo conocimos a Agustina antes de conocernos el uno al otro, y nos parecía grato asistir después de muchos años que la conocemos. Es más, organizamos después al día siguiente ir al parque de la costa con los chicos. La previa fue genial, es más, nosotros hicimos previa en mi casa con Mauricio y fuimos en Uber hasta Flores casi a contratiempo porque Elías ya estaba viajando para allá con Nazareno. Mauricio estaba súper paranoico con el ex novio, si iba a aparecer o no, pero bueno, estaba entregado a la suerte y que pasara lo que tenía que pasar. Por suerte, el pibe no vino según Agustina porque "yo era el problema", sin embargo, desde mi madurez le contesté que a mí me daba lo mismo, yo no tenía por qué sentirme incómodo por su presencia".
Más allá de terminar destruídos, terminamos comiendo en Mcdonalds a la salida y teníamos que prepararnos para ir a la casa de Nazareno e ir al Parque de la Costa. Entonces, en ese momento fue cuando Nazareno se subió a un taxi sin consultar con nadie y "el que lo seguía, genial, el que no, besito". Éramos cinco personas, lógicamente no íbamos a entrar en un taxi así que yo me negué porque ¿por qué no podíamos volver en colectivo? Siempre teníamos que adecuarnos a los caprichos de Nazareno. Yo me negué a viajar, así que Mauricio me hizo la pata, sin embargo, Melina y Elías se subieron. Nosotros fuimos en colectivo, pero tuvimos que bajarnos en pleno Corrientes y Pueryrredón porque él se empezó a sentir mal. Hicimos el resto del viaje en taxi. Llegamos y nos duchamos en la terraza mientras Melina y Elías estaban muertos en una silla y nos escuchaban hablar. En ese momento, la calentura y el alcohol que todavía teníamos en la sangre, empezamos a chapar con Mauricio y se la chupé un poco. Pero no queríamos alertar a los demás que estaban afuera. Después se unió Elías a la ducha colectiva, pero no pasó nada más. El viaje se hizo un poco tedioso, hacía calor, estábamos prácticamente amanecidos y yo con una molestia en los ojos terrible. La fila no se nos hizo tan larga, así que zafamos. 
Este fue un día clave porque en los momentos en que Nazareno se iba, Elías se puso a hablar de lo que le había dicho Nazareno acerca de su cumpleaños que sería en menos de dos semanas: quería que pusiéramos $500 per cápita para alcohol y bus y no sé qué más. Entonces, en un momento, tanto Elías como Melina y yo nos pusimos a debatir sobre eso. Era mucha plata pedir, ¿acaso nosotros teníamos que bancarle el cumpleaños a Nazareno? ¿Era necesaria tanta plata, para qué? Elías contó que le mencionó a Nazareno que era mucha plata, y que él preguntó "¿Te parece?". Se lo contamos a Mauricio y opinó lo mismo. Yo mencioné que Halloween había sido la última vez que hacía una previa con él porque no me estaban gustando sus actitudes, y que lo más probable era que no fuese a su cumpleaños siempre pidiendo plata y sin saber qué hacía con eso. Podía quedar mal, pero quería saber qué iba a pasar con este tema. Una semana después, Nazareno me manda audio preguntándome si a mí me parecía super caro la propuesta porque "Elías y Mauricio le dijeron al grupo que había gente que quizás no pudiera pagarlo". Me habló a mí para preguntarme si yo era uno de esos ya que él se iba a 'hacer cargo' de aquellas personas que no pudieran poner los $500. Ahí te das cuenta el poder de la manipulación cuando en realidad sería más fácil decir 'bajo el precio' y listo. Discutimos y todo quedó mal porque le fui de frente y le contesté que si el quería festejar su cumpleaños como 'casamiento de Pampita', entonces se pagara él mismo su cumpleaños porque entonces si yo quiero hacer mi fiesta en un yate, ¿voy y les pido a ellos plata para hacerlo? No me parece que tenga que ser así. Me respondió soberbiamente diciendo que 'ese es su cumpleaños y él lo festeja a su manera, que cuando sea el mío, yo lo festejara como me gusta'. A lo que ataqué preguntándole 'qué pensaba hacer con $500 x 40 invitados'. Se ofendió más usándo la psicológica y reprochandome 'que hasta me puse a hacer la cuenta'. Lo que en realidad él no supo fue que Elías había hecho todos los cálculos y demás. Listo, para mí era un peso menos ir al cumpleaños de él.
Para finalizar esto, el día del cumpleaños fui solo a Puerca y los esperé adentro. Elías y Mauricio se la pasaron en la previa del cumpleaños hablándole a los invitados de la 'estafa' de Nazareno, y se lo dijeron a un amigo de él quien después fue y buchoneó todo siendo que yo me había juntado a correr con él hacía seis meses atrás y me habló pestes de Nazareno, lo odiaba. Cuando Nazareno me vio a mí adentro, se habrá querido morir. Y peor fue cuando a la salida, fuimos a Mcdondals y me lo crucé de frente en las escaleras y ni lo saludé. Ese último tiempo Nazareno se había convertido en un monstruo, codicioso y ambocioso, siempre haciendo cosas para quedar como 'el mejor' en todo. Y no es que me molestara, pero cuando las cosas pasan un límite y empezás a tratar mal a tu gente, no está bueno. Y nosotros le dimos vía libre sin darnos cuenta para que lo hiciera, el drama es que ahora Elías tiró la piedra, armó embrollo y escondió la mano porque jamás quiso hablar con Nazareno de frente y decirle las cosas como son porque, además, Elías descubrió que no había que pagar nada adicional para el partybus cuando Nazareno nos juraba que a él le cobraban un impuesto y nosotros teníamos que financiárselo con esos $500. Nazareno se enteró porque Mauricio hizo una historia con Agustina en una previa a la vuelta del boliche y se escuchaba como Elías contaba lo del partybus y esa estafa. Mauricio prefirió también quedarse callado y hablarlo 'en privado' cuando le fuese a hacer algún servicio de peluquería a domicilio a él y a la madre.
Lo poco que quedaba del año lo pasé despidiéndolo con compañeros de trabajo y colegas: cena con un grupo, juntada y asado con otros. También, despedimos el año con Selene y Rebecca quienes afianzamos el vínculo después de un tiempo sin vernos personalmente. Tenía que prepararme para ir a visitar a mis papás y pasar Navidad con ellos, y después volver a Buenos Aires para irme a Mar del Plata con Mauricio y pasar con él Año Nueva en mi segunda ciudad favorita, eso es otra historia.
F.A.M.
