
-Hola puto, ¿qué haces? - Hola trola, ¿a cuántos te cogiste? - Y cosas así, son formas de hablar y bromas que nos hacemos entre los gays. Lo raro de esto fue cuando lo empecé a 'stalkear' o sea a seguir sus movimientos en el whatsapp para saber cuándo se conectaba, y me llevé la sorpresa que yo nunca podía ver cuándo él se conectaba pero da la casualidad que después yo recibía sus mensajes.

-Hola gil ¿qué hacías? - Recibí un día un mensaje de él
-Nada, acá en casa, recién llego de la facultad.
-Yo trabajando. Con ganas de estar en casa - La conversación cada vez se iba haciendo más pervertida hasta que él me dice
-¡Qué cola, eh! ¡Cómo cojes! - Entonces le pregunto sorprendido
-¿Por qué decís eso, estás mirando las fotos que alguna vez te pasé?
-No, algo mejor. Tengo un video que filmamos - Yo le envié risas y le contesté sarcásticamente.
-Dale, no seas boludo. Supongo que estás mintiendo.
-Es en serio. Lo tengo para pajearme cuando estoy solo.
-Sos un morboso tremendo. No te creo, a ver, enviame una captura - Yo no estaba seguro si Chris me decía la verdad, además calentarse con un video de su pareja teniendo sexo con otro es muy fuerte. Pero había sido que era verdad, Chris me envió una captura del video donde se veía a Lautaro cogiéndome de costado, obvio sin mostrar nuestras caras.
-Pero vos sos un hijo de puta ¡menos mal que te dije que no quería que me filmarás!
-Igual quedate tranquilo que esto sólo va a circular entre nosotros, no se va a subir a internet ni nada por el estilo.

-Puto, menos mal que te pedí que si filmabas, que no se vea mi cara. Hay un fragmento donde se ve.
-Bueno che, ya fue - Entonces todo era cierto, yo tenía un video pornográfico como esos famosos, ahora yo sólo rogaba que no ande esparcido por la red y mis conocidos pudieran reconocerme. A los días siguientes vuelvo a recibir mensajes por parte de Chris con un "Hola" y mi sinceridad me superó
-¿Qué haces, gato? Che, escuchame una cosa, no soy boludo. Sé que me bloqueas pero no entiendo por qué lo hacés.
-No, nada que ver, yo no te bloqueo. Se me rompió el celular y estuvo en servicio técnico, lo retiré hoy.
-See, claro. Es la excusa más tonta pero ponele que te creo - Si no me equivoco le volví a repetir lo mismo la siguiente vez que me volvió a hablar
-No hace falta que me boquees, tarado. Ya sé que estás de contrabando y que Lautaro no se tiene que enterar pero yo sé cuando hablarte y cuando no, sé que cuando vos me hablás es porque podés - Trató de evitar contestarme pero le dejé en claro que yo no era ningún boludo.

A Martín también lo stalkeaba, a pesar que no éramos amigos al menos veía cuando cambiaba las fotos de perfil y de portada. Una noche de viernes me agarró una depresión, el hecho de estar solo y pensar en lo de Martín y que necesitaba espacio para mí, me taladraban la cabeza. Cuantas veces hemos planificado con Débora para irnos a vivir solos y aún nada, yo quería irme de mi casa porque ya me convertí en un chico distinto, ya no dependo de mis papás y ahora estoy en una posición distinta donde necesito libertad y un nuevo "ambiente" para poder ser quien soy realmente. A veces me siento muy reprimido estando en mi casa con ellos y prácticamente conviviendo con otros familiares aunque no en la misma casa, con la gente del barrio que a veces me mira raro porque me produzco demasiado y ni les cuento cuando salgo a bailar. Pero sé que es cuestión de cambiar "los aires" y frecuentar otros, eso lo lograría si me mudaría solo pero en mi trabajo tengo problemas con las liquidaciones (porque el trabajo es así en sí) entonces se me complica irme a vivir solo. Cuántas noches me pasé mirando departamentos por internet y hasta me animé a decirle a mi mamá que quería irme a vivir solo; ella me dijo que me "fije" porque está todo muy caro y tengo que tener en cuenta los detalles como las expensas y la garantía propietaria que te exigen las inmobiliarias.
Hablando con Débora por mensajes le conté lo que me pasaba, que esta maldita vida me ponía a Martín otra vez en la cabeza y se me presentó la necesidad intensa de abandonar este lugar de residencia. Además apareció el mismo problema de siempre: Santiago que parecía evitarme, me contestaba los mensajes cuando él quería (lo contaré en profundidad en la próxima entrada). Débora me sugirió algo: que intente establecer comunicación con Martín, que me anime a hablarle ¡pero qué cosa más loca! Yo no estaba seguro de eso pero bueno, ella me aconsejó eso por si el destino era estar juntos él y yo. No sé, yo sentía que era como chocar con el pasado, entrar en una dimensión paralela a la realidad y querer distorsionarla; pero aun así le hice caso a Débora. Un día entré al facebook de Martín y le envié un inbox (mensaje privado) preguntándole cómo estaba, que me había acordado de él porque me apareció por casualidad en el buscador de facebook. Ojala él me contestara, ojala estuviera tan entusiasmado como yo en volver a estar juntos, necesitaba de él porque mi vida no fue la misma desde que lo conocí pero yo ni siquiera sabía nada de él.


-¿Pero a qué hora vamos a volver a casa sino? Pensá que va a ser muy tarde y es peligroso ¿te parece ir a un hotel a pasar la noche?
-Ay pero que puta sos ¿me querés llevar al telo para hablar? Te aviso que yo el martes a la mañana tengo facultad así que llevaré mi bolso con mis cosas porque a la mañana me voy directo - Yo era otra puta que nunca le dijo que no, sino que acepté su propuesta pero había un pequeño gran problema porque para esas fechas yo también había arreglado para vernos unos minutos con Santiago, que me pasara a buscar por la facultad (ver próxima entrada). A mí cómo me encanta armar líos porque algo parecido pasó con Santiago: según él siempre ocupado y yo con mis horarios apretados hizo que acordáramos un martes para vernos, y justo iba a ser al día siguiente que yo estaría con Chris ¡qué desastre! Yo salía de la facultad a las 13hs y a las 17 hs tenía que estar trabajando sin contar que tenía una hora de viaje hasta mi casa. Por lo tanto íbamos a estar como mucho 2hs con Santiago hablando. En fin, Chris me dijo que a eso de las 23hs estuviera en Santa Fé y Pueryrredón ese lunes, yo salí de trabajar y me fui a mi casa a prepararme para "hablar", no sé cómo llegué a horario pero el otro todavía estaba en viaje. Cuando yo llegué a esa esquina en plena noche, él todavía no había llegado ni a Puente Saavedra para tomarse el otro colectivo, por eso anduve deambulando hasta vi unos chicos lindos y me detuve a pocos metros de la esquina porque mi radar gay se había activado.

-Sí, fue Fede, ya me olvidé de lo que pasó entre Lautaro y vos, como te dije: somos putos. Con vos está todo bien, sos re buen pibe.

-Nada, él está en su casa con su familia y yo le dije que iba a estar en la mía - Empezamos a hablar de cosas de putos (ya que la propaganda de toallitas femeninas usaba el slogan "Cosas de mujeres" entonces yo acá voy a usar "Cosas de putos"), entonces me contó las veces que Lautaro lo había cagado y que él también lo cagó, etc.


-¡Pará boludo, me la metiste muy fuerte! - Le dije y cerré mis ojos porque esto fue algo que nunca me había pasado, no fue dolor de placer sino dolor físico.
-Uh, disculpame. Mejor dejemos acá ¿te parece?
-Si, porque me lo rompiste, tarado - Le hice una broma y ahí nos quedamos dormidos. A las 6am suena mi despertador porque era hora de irme a estudiar, seguramente yo estaría bostezando toda la mañana y encima debería estar espléndido porque Santiago me vendría a visitar al mediodía.
-Disculpá que tengas que ver esto, pero es también para que vayas conociéndome - Le dije a Chris y saqué la mini planchita para el pelo y me producí frente a uno de los espejos, yo también me pongo base en la cara de una marca de cosméticos contra los granitos, y me arqueo las pestañas. Es re de pasivo, lo sé pero no me hace ver como una mujer sino como un chico con rasgos finos y llamativos. Al salir, lo despedí a Chris en la esquina porque yo me iba en subte a pesar que estaba cerca de mi facultad, obviamente que no hablamos demasiado adentro en el telo, dejamos las cosas claras antes de entrar que todo esto era una pelotudez. Lo que pasó entre nosotros esa noche debía quedar entre nosotros...
F.A.M.