

-Ah, con razón. Esa noche de la fiesta por el lanzamiento del álbum de Katy Perry, cuando yo pasé a buscarla a Silvina, lo vi a él afuera de la Est. Federico Lacroze justamente por esto, porque él esperaba a alguien para ir a bailar a Puerca (y, si no me equivoco, por primera vez ya que nunca antes lo había visto). Gastón me miró sorprendido desde lo lejos y se le notaba la timidez, se encerró en su grupo y no hizo más nada que quedarse tímido porque ni siquiera bailó. Pero qué loco, ¿no? Pensé que nunca jamás en la vida me lo volvería a cruzar a Gastón C. pero después de 2 años, lo volví a encontrar aunque muchas cosas cambiaron: él ya no continuaba siendo mi platónico, lo había dejado de ser muchísimo antes de que él me eliminara de facebook, supongo que por su actitud de pasivo e histérico frente a la charla con otro pasivo. También, él mismo ya no era el mismo porque las fotos en su facebook le daba un 'touch' de heterosexual en cambio al verlo esa noche no era más que una del montón. Tampoco me gustaba su actitud de creído, eso de creerse distinto a los otros gay que, sin embargo, él pertenecía a la misma bolsa de gays que tiempo después yo conocería.
Esa no fue la única sorpresa que me llevé esa noche, sino que me lo encontré a Tony con sus amigos: Fernanda, Alexis y la Viqueira. En un primer momento, me hice el tonto y no los quise cruzar, después de todo lo que pasamos y habernos dejamos de hablar, no sé qué cara le podía poner. Y aunque él lo niegue, también fue bueno conmigo. Cuando pasé por al lado de él mientras yo iba a la barra no recuerdo con quién, él me toca la espalda entonces me doy vuelta y me hago el sorprendido y lo abrazo:
-¡Hola, Tony! ¿Cómo estás, nene? ¿Qué andas haciendo? - Le dije y saludé a mi tía preferida (Alexis) y a los demás.
-Bien, acá saliendo un poco con los chicos ¿vos?
-También, disfrutando de la noche - Nos quedamos mirando a los ojos.
-Bueno, cuidate ¿dale? - Me dijo y yo me atreví a confesarle.
-Sabés que estuve pensando mucho en estos últimos momentos en vos.

-No sé, supongo que por todo lo que pasamos.
-Ay, tonto. ¿Por qué no me hablás? Si tenés mi número, hablame y sigamos en contacto - Me respondió sinceramente Tony. Volvimos a mirar al grupo de amigos y Fernanda dice algún comentario como:
-Miralo, es re lindo, me encanta los rasgos faciales que tiene, sus ojos, son hermosos - Dijo ella - Aparte baila que ni te cuento. Yo también era así a su edad, ahora ya no puedo ni moverme - Concluyó Fernanda con un chiste. Recuerdo que Tony me dejó la vía libre y me dijo:
-Andá, andá que sos joven, pasala lindo - Lo volví a abrazar y desaparecimos con la otra persona que estaba a mi lado y no recuerdo quién era, si Agustina o no sé quién.
Tras estar un poco perturbado al día siguiente, domingo, también estuve hablándole a Facundo y le pregunté si él tenía ganas de salir porque, al ser fin de semana largo, estaría bueno que el domingo salgamos también. Él me contestó que no saldría porque sus padres le exigen que sólo salga una vez los fines de semana. Aunque él me recomendó que hablara con los chicos que había conocido el viernes, que ellos siempre suelen salir. Las solicitudes de amistad de ellos me llovieron ni bien llegué a mi casa ese sábado, los acepté a todos obviamente, entonces pude ver que Ricky y Andrés irían a Amérika. Les pregunté si era seguro que iban a ir porque yo quería salir y no tenía con quién. Ellos me dijeron que tenían las re ganas de salir y que irían, sin embargo ninguno de los otros chicos querían salir: ni Mateo, ni Nahuel, ni Alan. A Ricky ya le había pasado mi número de celular el día que volvimos juntos, así que nos comunicaríamos por ahí. Una de las cosas que me llamó la atención fue ver que, en la columna derecha de facebook, me aparecía como sugerencia de amigo, un chico que tenía el mismo nombre y apellido que el amor de mi vida "Martín Riveiro", cosa que me pareció raro. Eso sí, teníamos varios amigos en común y muchos eran los chicos que había conocido el viernes. No lo agregué porque me parecía estúpido agregar a una persona desconocida, todo porque lleva el mismo nombre y apellido que Martín. Vi las fotos que tenía en público, parecía alto, en una foto editada, sin remera parecía tener pelos en el pecho y eso no me gustó: dejé de mirar sus fotos.




-Hola, bonito - Me dijo.
-Hola, ¿todo bien? - Le contesté yo
-Sí, ¿cómo te llamás?
-Federico ¿vos? - Le dije al oído
-Yo me llamo Benjamín - Nos miramos a los ojos y él puso sus labios contra los míos para besarnos frente a sus amigos y los míos. Abría su boca gigante como si me estaría comiendo en serio, nos besamos de forma tan atrevida que Ricky y Andrés me tocaron la espalda y me dijeron "Vamos". Yo les contesté que esperaran porque todavía no habíamos terminado.
-Sos re lindo. ¿De dónde sos? - Me dijo Benjamín.
-Vos también. De Lomas de Zamora ¿vos? - Le contesté yo.
-De zona norte: Benavidez. Un poco lejos.
-Sí, la verdad que sí pero anduve por esa zona, por Nordelta.
-Ah bueno, Nordelta es Benavidez - Me dijo, y nos quedamos sin conversación así que nos volvimos a besar hasta que los chicos me apuraron para ir al túnel.
-Vayan ustedes, yo me quedo. Después los alcanzo - Les contesté. Ricky y Andrés siguieron su camino. Seguí besaándome con Benjamín desaforadamente hasta que él empezó a tocarme el culo.
-¿Vamos a otro lugar?

-Bueno, supongo que acabará y después se irá - Supuse yo, por eso mismo seguí chupándosela pero no acababa, él seguía siendo así de bruto, tenía mi saliva por toda su pija hasta que yo me cansé y me levanté. Nos volvimos a besar y me propuso irnos de ahí e ir al otro túnel con más "espacio".

-Ay pero que zorra, mirá a dónde lo trae al chico - Dijo Andrés en broma.
-No, nada que ver. Veníamos a ver que onda nada más ¿y ustedes? ¿están fichando a quienes entran para después atraparlos? - Les dije porque justo en la entrada a ese túnel había un pequeño cartel de "Salida" que iluminaba la entrada con verde.
-Dale, ¿me vas a venir a decir que sólo venían a pasear por acá?
-Sí, tonto, en serio. No veníamos a hacer nada - Les dije yo, y avanzamos con Benjamín porque ellos fueron a buscar suerte en el otro túnel. Él me besó y me empezó a meter mano adentro del pantalón para tocarme el culo, lo dejé pero cuando empezó a meter dedos le dije que no:
-Date vuelta - Me exigió.
-¿Para qué? - Le pregunté, y él ya tenía su pija afuera - No vamos a cojer, eh - Le advertí por las dudas.
-Dale, un ratito - Insistió y mi respuesta rotunda fue 'no'.
-Volvamos - Le dije, pero Benjamín me acorralaba más y más intentando colarme los dedos mientras yo me negaba y me dirigía a la salida pero él se interponía - Hey, en serio te digo, si querés nos quedamos pero no pienso cojer acá.
-Uh, bueno dale - Nos quedamos un rato tranquilos y Benjamín empezó a buscar a su amigo entre todos los que estaban cojiendo contra la pared o besándose o haciendo un pete. Como no lo encontraba, decidió usar el encendedor para hacer luz. Obviamente, a su amigo no lo encontró pero vimos la cantidad de chabones que había en los rincones.

-¿Qué hacés? Ya te dije que eso no lo vamos a hacer.
-No te voy a hacer nada. Tranquilo. Sólo vamos a jugar. Dale, no te voy a hacer nada - Me bajó un poco el pantalón y apoyó su pija en mi agujero, se hacía el santo hasta que en un momento intentó metérmela y yo puse mi mano para que no pasara nada, entonces lo empujé hacia atrás pero él hacía tanta fuerza que, cuando me di cuenta, su pija ya había entrado. Pegué un gemido que lo controlé porque estábamos en el túnel, a él no le importó y empezó a cojerme. Creo que no servía de nada luchar contra eso porque ya me estaba penetrando, me dejé y, hasta cierto punto, me dio morbo. La cuestión acá era que no usamos preservativo, por eso mismo yo no quería cojer con un desconocido; además, nunca había entregado la cola en el túnel. No fui más allá de un pete. Lo peor fue que yo no me fui preparado para eso, no me hice una limpieza profunda porque, de última, si yo iba a un telo, lo hacía en el baño antes de cojer. Pero no. Benjamín disfrutaba cojerme, lo hacía a lo bruto y en parte me gustaba, también él me gemíaal oído me decía "Te quiero hacer el amor". Y yo pensé dentro de mí: "¿El amor? Mmm, dos personas me lo dijeron hasta el momento, el otro 95% nunca me mencionó nada de eso. ¿Vivirán en un mundo de fantasías?"

-Menos mal que te dije que yo no quería cojer, eh - Le reproché
-Uh, perdoname, bonito. Vení, quedémonos bailando por acá - Me contestó él; sin embargo, yo no tenía ni ganas de bailar, la panza me empezó a doler. Pasaron cuarteto y a mí no me gusta (porque me trae algunos recuerdos feos de mi infancia), me quise ir a sentar pero Benjamín me agarró e hizo que bailara con él. Cuando yo daba la vuelta, él me apoyaba y me besaba el cuello.
-¿Te hago una pregunta? ¿Cuántos años tenés? - Le pregunté yo.
-20 y ¿vos? - Cuando me dijo eso, me pregunté a mí mismo "¿20 años? Parece de más" Entonces me desilusioné un poco más, y debí sospechar cuando me dijo "Te quiero hacer el amor". Creo que si hubiera sido más grande de edad, le hubiera dado un poco de bola. Mi mirada hacia él fue cambiando, se me hacía que no lo había visto bien cuando lo vi por primera vez en la pista de abajo. Seguimos bailando un ratito más hasta que le dije que me iría a sentar, y él que insistía que no, que me quedara; sin embargo, yo le mentí diciéndole que mis amigos me habían enviado un sms y que necesita encontrarlos.

-Me duelen mucho las piernas - Le dije, pero cambié la palabra "panza" por "piernas" - Tengo muchas ganas de irme a mi casa.
-¿Te vas a ir, bonito? - Me preguntó Benjamín - Yo te quería proponer ir a mi casa.
-¿A tu casa? Pero ¿podemos? Me hubieras dicho antes, ahora en serio, estoy muy cansado. ¿Vivís solo? - Le pregunté
-Es que te iba a decir que nos vayamos juntos ¿dale? Venite para mi casa. En realidad, vivo con mi hermana pero no pasa nada - Él me contó parte de su vida, un poco sobre la relación con sus papás (que más abajo voy a contar en detalle).
-Te molesta si nos vemos otro día - Él decía que yo no iba a ir con él bajo ningún concepto, trataba de convencerlo que pronto nos veríamos pero no esa noche - Aparte estoy así, me siento sucio porque estuve bailando con mis amigos y no da que yo vaya con vos así, por eso quiero ir a mi casa.
-¿Y si te acompaño a tu casa y después vamos a la mía?
-No, te vas a asustar. Yo vivo en un barrio que no es tan lindo estéticamente.
-No importa, yo tampoco vivo en un gran barrio -Tras reiterarle que quería irme a mi casa, le dije que bajemos a la pista principal para encontrar a mis amigos, entonces me senté y él seguía insistiendo en que yo me vaya con él pero para tranquilizarlo le pasé mi número de celular y él me pasó el suyo. Le prometí que cuando llegara a casa lo llamaría para vernos a la noche siguiente con la condición que ahora me dejara ir. Entonces tras ese intercambio, le advertí en cuantos minutos me iría, y fue así como salí de Amérika mientras llovía. Qué raro que yo salga de AMK y llueva.
