-Sí, de repente todos me hablaron. ¿Vos que onda?
-Ah, bien nos vamos a conocer entonces. ¿Con quién vas, solo?
-Buenísimo. No, voy con algunos de los chicos. Ellos me invitaron.
-Ah, calculo que serán los mismos con los que me encontraré: Ricky, Andrés, Mateo, Pablo...
-Sí, así es. Vamos en el mismo grupo de chicos.
-Bien. ¿Vas en colectivo? - Me preguntó él.
-Sí, por ahora soy pobre. Uno hasta Pqe. Patricios y de ahí el 160.
-Ah, claro, yo voy desde Lanús en el 160. Si te ibas desde ahí, te acompañaba.
-Lo que pasa es que no tengo nada directo a Lanús, y a esas horas es peligroso caminar para tomarme el colectivo hasta allá.
-Después nos volvemos juntos... a tu casa, para que no te vuelvas solo - Me hace una broma.
-Si es así, sí - Martín me preguntó si yo tomaba a lo que le contesté que sólo agua, si supiera...

-Hola nena ¿cómo estás? - Me dijo él - ¿Que onda el domingo pasado que desapareciste? Contanos ya ¿la tenía grande? - Yo me empecé a reír.
-Ay no, no pasó nada - Mentí y ellos volvieron a contarme la trava-fast que se hizo después de Amérika a la cual ellos asistieron, pero además, nos matábamos de risa de la publicación de Andrés en facebook que pedía discreción y nosotros terminamos revelando lo que habíamos hecho. Después de que Andrés haya terminado de comer su chori-pan esperamos que lleguen los otros chicos, Pablo era tan tímido que hasta los dos le cargaban porque lo conocían de la página de "Disponible" dónde él era otra persona, más activa y menos tímida. Caminamos para la parada del 160 y ahí llegó Darío, el amigo de Nahuel, después llegó Mateo con su bolsita con bebidas alcóholicas donde trajo un Champagne para mezclarlo con Speed y nos pusimos a tomar los 6 mientras hablábamos, hacíamos chistes y nos reíamos tanto que la gente que andaba por el lugar nos miraba.
Al llegar el colectivo, nos subimos y fuimos sentados atrás de todo, menos Darío y Mateo que quedaron adelante. Atrás habían unos chicos pakis, de nuestra edad pero eran esos típicos chicos que se hacen los machos, que compiten por las minas y que en parte son un poco homofóbicos (tienen la mentalidad de chicos de secundaria). Yo con Andrés me puse a hacer chistes con muchas indirectas a los chicos y a uno de ellos no les le gustó ni ahí lo que decíamos y nos dijo algo como "¿Qué onda conmigo?" A lo que nosotros nos miramos y no le dimos importancia porque es un chico que vive en una realidad común y vulgar, muy diferente a la nuestra. Otro de ellos, del mismo grupito nos preguntó a dónde íbamos, entonces nosotros le contestamos que a Mandarine, ellos iban a Terrazas creo, que es un boliche paki pegado a Mandarine. Bajamos del colectivo y caminamos, en la entrada había una Drag Queen a la cuál Andrés se acercó y la saludó, porque además, Andrés es también Drag Queen, por eso mismo nosotros le insistimos que en una próxima salida se viniera vestido así. El problema era que no tenía lugar donde cambiarse, porque no daba venir en el colectivo de Drag Queen y muchos menos salir cambiado de esa forma de alguna de nuestras casas. Entramos al boliche y 'Love Profusion' de Madonna sonaba, yo dije:
-Si así me reciben, no me quiero imaginar el resto de la noche - Nos juntamos con los chicos en el medio de la pista, pero de repente Andrés desaparece cuando ve a esos tres muchachos que conoció tiempo atrás, tal cual aquella vez que yo había salido con ellos.



-No seas malo ¿en serio? Mal lo tuyo, con razón ni me mirabas - Yo sonreí.
-Me estás queriendo matar - Le contesté, y él me dijo que estaba todo bien. Mirándolo personalmente a Martín era bastante lindo, petiso, supongo que de mi edad, pelo con rulos, ojos claros y además, él estaba vestido con una camisa blanca, un chaleco negro y un chupín rojo.
-¿Vas a pedir algo, qué tomás?
-No sé, los chicos no quieren tomar y está caro como para que uno solo compre la promo.
-Bueno, compramos un vodka con speed y vamos a media ¿dale? - Me propuso él y acepté, él pagó y yo le di el cambio. Mientras tomábamos, Ricky nos empieza a sacar fotos pero esta vez de cerca, era tanto el flash que nuestras caras salían horrendas; yo supuse que las iba a borrar o que al menos no las iba a subir a facebook.
-No sé si está mal que te lo diga pero tenés el mismo nombre y apellido que mi ex - Le conté la verdad en parte, porque Martín no había sido mi ex sino un chico con el que anduve.
-¿Qué? ¿Posta? - Se sorprendió él.
-Sí, en realidad él tenía el apellido de la madre en facebook pero en el DNI no.
-Bueno, lamento decirte que en realidad no me llamo así, ese alias que yo uso es falso para circular en el ambiente - Me contestó él y se me desmoronó mi teoría sobre "todas las personas con las que estuve vuelven a aparecer en el presente de alguna forma".
-No, no me digas eso. Ya está, ya no me caés bien - Le dije en broma - Pero entonces ¿por qué elegiste justo ese nombre y ese apellido?
-Porque sonaba bien ¿no me crees, no? Mirá mi DNI - Él sacó su cédula y me la mostró, pude notar en ella otro nombre y otro apellido, aunque todos lo conocían como "Tincho" y no con su nombre real.
-Está bien, te creo - Le dije después de bebernos los tragos, y volvimos junto a los demás chicos a la pista de baile. Martín estaba preocupado porque su amigo Pablo desaparecía y no estaba del todo consciente porque estaba tomando.

-Hola chico "Martín". ¿Así que tu ex se llamaba así? Mira vos.
-Sí, fue el amor de mi vida. Así que, imaginate.
-Fua ¿para tanto? Bueno, ahora estoy yo - Me dijo él y yo sonreí - ¿No tenés calor? Podrías desabrocharte la camisa, algunos botones -Martín se acercó más a mí para desabrocharme a lo cual yo me rehusé justamente por el acné que tengo en el pecho y en la espalda.
-No, no - Le contesté - No puedo, me desprendo de abajo pero de arriba no.
-Uy, pero que pasa ¿qué tenés?
-Nada. Tengo tatuado el nombre y apellido de mi ex - Le mentí.
-¿En serio? - Martín abrió grandes los ojos.
-Si, pero no lo voy a mostrar, o sea quiero olvidarlo.
-Ay no, por favor, dejámelo ver. Aunque sea a mí, después te volvés a prender la camisa.
-No, encima ahora me dijiste que vos no te llamás así. Igualmente voy a ser malo y te voy a confesar la verdad: te agregué por accidente a Facebook.
-Sos malo, entonces ahora me voy - Yo lo sujeté de la mano y le dije que no se vaya, por eso retrocedió e intentó nuevamente ver el tatuaje pero le dije que no.
-Desabrochate vos, vení - Le dije yo, y le desprendí el chaleco que tenía; pasé mi mano disimuladamente por su cuerpo - Se hizo el ofendido y caminó para el otro lado, yendo para la salida al patio del boliche y cuando lo vuelvo a mirar, estira su mano para que yo también suba los escalones así salíamos. Sonreí tímidamente y cuando los dos estuvimos juntos, él procedió a darme un beso, así que le seguí el juego y me lo terminé comiendo. Wow, ¿quién iba a pensar que esto iba a suceder? Lo peor de todo era que Martín alias Daniel Terra (de ahora en más) me estaba gustando y yo no entendía por qué por fotos lo vi de una forma y ahora de otra, en realidad por qué no lo vi bien. Tenía labios un poco grandes pero me encantaba, nos besamos con lengua y hasta hubo unas manos pedidas por nuestros cuerpos... me encontré con una menuda sorpresa: Daniel tenía un cuerpo marcadito y eso me hacía dar cuenta que era activo. Tras besarnos y sacarnos las ganas que nos teníamos uno al otro, volvimos con los chicos haciendo de cuenta que nada pasaba. Por eso bailamos normalmente, de vez en cuando teníamos algún que otro acercamiento donde yo intentaba besarlo, pero le daba "cosa" exponerse, así que sólo jugamos un poco. En ese momento, al mirar hacia la barra pude ver a un chico conocido pero no sabía de dónde... ¡Ah sí, de la facultad! ¡Uy pero que casualidad! Ese chico era uno que cursa a la tarde, mientras yo a la mañana, sólo cursé una materia con él y nunca nos hablamos; pero no importaba, si me reconocía, ya está.
Dijimos para ir a comprar algo de tomar, Daniel y yo nos acercamos a la barra que está detrás del escenario aunque al instante lo agarré y lo acorralé para volverlo a besar y puse mis manos sobre la suya contra la pared. Tras intercambiar un poco de saliva, me mira:
-Sí, por eso te tenés que portar bien porque ahora sos Daniel de Arias - Le contesté yo.
-No, yo soy Daniel de Terra y nadie más - Me respondió por eso solté sus manos - Una cosa ¿qué sos de Facundo vos? Porque nosotros estamos acá besándonos y nunca supe eso.
-El novio ¿por qué? - El me mira y se ríe.
-Lo único que falta, que yo me esté comiendo al novio de él después de reprocharle lo mismo.
-No, mentira. Soy el amigo nada más pero quedate tranqui que no le voy a contar nada así no nos dice nada a ninguno de los dos.
-Ah bueno, bien - Tengo que decir que Daniel tenía un aliento raro, ¿será por la bebida? No lo sé pero iba a hacer lo posible para cambiar eso. Puse mis manos sobre su cintura y metí una debajo de su remera - Él me miró, sonrió y me dijo - Vamos allá - Donde justo habían un lugar para sentarse contiguo al baño de hombres, al lado de la barra, así nadie nos miraba. Él se sentó mientras yo me quedé parado frente a él, así nos besábamos mejor y de paso podíamos tocarnos con disumulo. Saqué un chupetín "Pico Dulce" y lo empecé a chupar para provocarlo, se lo convidé así también chupaba, le besé el cuello y él se dejó, de a poquito iba tocándole la panza hasta que él puso sus manos en mis nalgas. Daniel era mío aunque sea por ese momento, wow, ahora que estábamos más cerca me daban ganas de conocerlo, de pasear con él, de hacerlo feliz ¿pero qué estoy diciendo? Él es muy lindo, se acercaba al estereotipo de chico ideal que yo tengo por eso mismo mis sentimientos eran confusos. Seguí con mis manos en su panza tocando esos abdominales marcados, mientras nos besábamos y comíamos el chupetín, de a poquito yo bajaba mis manos hasta que toqué el elástico de su bóxer, sin embargo, metí un poco mi mano pero no tanto para no quedar como un cualquiera. Daniel en ningún momento se negó a eso, aunque metió sus manos adentro de mi pantalón para tocar mejor mis nalgas, desajustó el cinto y lo hizo. Creo que había llegado a un punto donde no podíamos sobrepasar más de eso porque estábamos en un boliche y, si nos calentábamos, no podríamos hacer nada.

-¿Me vas a dejar ver tu tatuaje? - Me preguntó nuevamente y tuve que confesarle la verdad.
-No, tontis. En realidad no tengo nada, sólo que no me desprendo la camisa porque tengo unas imperfecciones y bueno, nada, eso.
-A ver - Insistió y le mostré, a lo que él me miró con cara "eso no es nada" Entonces me quedé con la camisa desabrochada pero no permití que nadie más me viese. Uno de los chicos pasó por al lado de nosotros hacia el baño y nos vio, no recuerdo quién fue, por eso mismo volvimos al grupo que estaba entre la multitud; no por que uno de nuestros amigos no haya visto sino porque ambos habíamos desaparecido de la nada. Andrés se había llevado la cámara de fotos al sector VIP para posar con los "hombres de los sueños de muchos", y nosotros seguimos ahí mientras la noche avanzaba. Recuerdo habernos babeado porque los "strippers" o los "modelos con poca ropa" se habían subido a la tarima frente a nosotros y podíamos observar sus bultos encuerados que tenían, sobre todo uno de ellos que es famoso en el ambiente por ser lindo y tener buen cuerpo. Por eso mismo, Andrés volvió y Ricky le sacó fotos a ellos. Ese show habrá durante no más de media hora, por eso mismo, la tarima quedó vacía. Alrededor de las 5.30am, me senté y Daniel también lo hizo a mi lado: lo abracé y no sé qué le dije al oído pero hablábamos así, susurrándonos cosas. Obvio que Ricky no desaprovechó la situación y nos sacó esas fotos comprometedoras, donde yo le hablaba de cerca a Daniel y él me miraba y escuchaba. Nuevamente le besé el cuello pero le tenía terror a las marcas, así que fueron besos suaves.
Los chicos nos vieron en algo pero no importaba. Daniel fue a buscar a su amigo Pablo porque andaba perdido, vaya a saber uno por dónde, entonces nosotros mientras ya estaba amaneciendo nos subimos a la tarima a bailar y a sacarnos unas cuantas fotos. Ese chico, de la facultad me vio y se me quedó mirando por un rato porque me reconoció pero nada. Daniel estaba sentado en un banco, por eso me acerqué y le pregunté que le pasaba, él me contestó que no encontraba a su amigo Pablo:
-Pero dejalo, va a volver solo - Le dije yo - Dale, parate.
-No, es que está borracho y, aparte, nosotros siempre volvemos juntos - Él se paró y caminamos para donde estaban todos nuestros amigos aunque nos quedamos del otro lado de la tarima. Nos acercamos los dos otra vez y nos besamos aunque mientras estábamos disfrutando de nuestro beso, Ricky empieza con los flashes a sacarnos fotos; por eso, él me agarra de la mano y nos vamos un rincón a besarnos, ahí puse mis manos sobre sus piernas y de poco lo tocaba pero disfrutaba más ese beso. Ricky desde lo lejos intentaba sacarnos una foto, por eso al darme cuenta se lo dije a Daniel y volvimos con los chicos para irnos porque ya era de día. Salimos tomados de la mano los dos, sentía algo lindo dentro de mí porque Daniel me estaba gustando; además, que me vea el mundo porque de esa forma está genial salir del closet cuando te ven junto a un chico lindo. No sé qué íbamos hablando junto a los demás chicos pero su amigo Pablo se acopló al grupo aunque estaba como "perdido". Al llegar a un punto donde nos mezclamos con la gente común y vulgar que salían del boliche paki continuo, él me dice:
-Che, yo diría que nos soltemos porque ya veo que acá nos empiezan a decir cosas.
Era lo que yo también le estaba por decir, entonces nos soltamos y seguimos caminando hasta la avenida frente al aeroparque. Recuerdo que él sacó su celular y empezó a hacerse el lindo frente a los demás con la aplicación Sherpa, de pronto Ricky quiso ir a comprar un agua en un puesto de comida que había, y Pablo quiso comer una hamburguesa pero, como estaba lleno de gente, tardó muchísimo. Nosotros nos queríamos ir porque estábamos cansados y Pablo seguía esperando, aunque Daniel dijo que él lo esperaría por si nosotros nos queríamos volver. Yo me pregunté si nos volveríamos juntos o algo por el estilo como Daniel me había dicho, no te digo que él venga a mi casa o yo a la de él pero por lo menos ir abrazados en el colectivo. Fue así como noté a Daniel distante, todo por su "amigo" que desapareció en la noche. Nos despedimos como si nada hubiera pasado. Por un lado, Ricky se fue con Andrés y Darío en el 45 mientras que Mateo y yo subimos al 160. Inicié una charla con él: fue el más tímido de todos y el que menos llamó la atención después de haber entrado al boliche. Intercambiamos datos personales como lugar de residencia, profesión y ocupación y algunas datos más, creo que en Plaza Italia bajó y yo me fui durmiendo entre cortado.

-¿Qué hacías? - Me preguntó después de saludarme.
-Acá, haciendo cosas de trabajo y escuchando música ¿vos?
-Tranqui, en mi cama, desde la net. ¿Te ayudo con eso? - Me preguntó bromeando ya que él alguna vez se dedicó a lo mío. Le pasé una imagen de lo que yo estaba haciendo y dijo que, lo que yo estaba preparando, se parecía a lo que él hacía también, por eso mismo le dije que él se copiaba de mí - Claro, también me tatué el nombre de tu ex, pero ¿en serio se llama así? - Me mencionó haciendo referencia a lo de aquella noche.
-Sí, lástima que vos no te llamás así. Nos podríamos haber llevado bien - Seguíamos con las bromas.
-Uf, porque nos llevamos de mal - Me respondió cínicamente.
-Sí, y por eso te agarré a solas y hablamos aquella noche.
-Y nos pasamos el chupetín...
-Me lo robaste encima.

-¿Ves? Encima mordés - Jugábamos.
-Vos también mordiste, y no sé qué otras cosas más morderás.
-No, yo chupo... el chupetín ¿no? - Ironicé yo.
-Y sí, porque si me morderías la pija te pegaría... Re tierno yo - La cosa que terminamos hablando pavadas como que en realidad yo nunca había besado, entonces él me dice:
-Claro, yo fui tu primer beso.
-Te hubiera gustado - Le contesté, él me dijo que nunca pensó si fue "el primer beso" de alguien, yo le dije que tampoco pero que sí fui la primera vez de alguien sexualmente hablando. Esto parece que le trajo celos y me dijo algo así como:
-Bueno, me voy y vuelvo en un rato así me contás - Por eso mismo cortamos la charla. Si hay algo que odio es que me corten así o que siempre hayan excusas para no continuar; por eso, mismo dejé de hablarle por un tiempo.

