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domingo, abril 06, 2014

#80 - Loco Enamorado

Se venía una de las fiestas más importantes en el ambiente gay, parecía que el verano se hacía notar ya desde principios de diciembre y yo estaba más que contento por el hecho de que iba a cobrar todo lo que trabajé. Por otro lado, Mateo, Facundo, Ricky y Andrés, ninguno tenía plata. Yo pensé que debíamos asistir a ese evento masivo que era la Bag Fest. Por lo poco que me había adelantado Ricky por facebook, parecía genial y que la íbamos a pasar fenomenal y, la verdad que yo no quería que dejemos pasar esta oportunidad. Les dije que si yo cobrara el viernes, les pagaría la entrada a todos. ¡Sí señores, pondría $500 para pagarle las entradas a ellos! Aunque Mateo llegaría en auto, eso significaba que después haríamos un tour amanecidos nuevamente por la Ciudad de Buenos Aires. ¿Quién creería que yo pudiera encontrar personas geniales en la vida? Cero prejuicios, sin importarles el 'qué dirán', con ganas de disfrutar la vida así como yo, además, como para que yo les pagara la entrada se notaba que realmente me hacía bien salir con ellos. Y es más, quizás soltarme más frente a la multitud, era un paso hacia la liberación de mi timidez de una vez por todas. Como alguna vez dije, las cosas son distintas de noche que de día: una metáfora haciendo referencia a que cuando uno frecuenta el ambiente gay, el hecho de ir a bailar o ir a algún otro lugar como cine o sauna gay, es distinto como uno se siente a ir una mañana a la facultad, por ejemplo. Según la psicóloga: son facetas distintas, por eso uno se comporta distinto, pero ¿cuál es al final nuestra verdadera personalidad? 

Volviendo al relato... hasta el jueves a la noche, no sabíamos si iríamos a o no porque a mí recién me depositarían mi sueldo el viernes a la madrugada. Por eso mismo, esperé a que pasaran las 0hs y, al fijarme mi recibo de sueldo por Internet, ¡bum! enseguida los alarmé a mis amigos que hoy tendríamos la mejor salida por siempre. Recuerdo que al finalizar con las cosas de mi trabajo del año, un grupo de personas me había invitado ese viernes a brindar con ellos y comer algo alrededor de las 19hs pero yo me fui de shopping olvidándome completamente de ese acontecimiento al cual quería asistir. Anduve por la zona del Abasto y mismo, en ese shopping, entré a comprarme ropa y unas gafas de sol. A la noche, alrededor de las 20.30 cuando llegué a casa, me doy cuenta de todas las llamadas perdidas que tenía en mi celular laboral pero no le di importancia y me empecé a preparar porque con los chicos nos encontraríamos en el McDonald's de Pte. Pacífico. Como yo tenía que irme para el lado de Pqe. Patricios sí o sí, entonces caminé unas cuadras para poder tomarme cualquiera de los dos colectivos que me llevaran hasta ahí, por suerte Ricky y Andrés me había avisado que saldrían temprano. No sé por qué pero yo sabía que algo malo iba a pasar, lo intuí porque sentía una vibración negativa. Mismo caminé esas cuadras para poder tomarme otros colectivos porque si me quedaba en la parada de mi casa esperando y esperando, quizás algo malo me iba a suceder. 

Fue así como tomé el colectivo y me sentí a salvo. Iba un poco vacío pero más que nada por la hora, eran las 23hs. Detrás de mí, iba sentada una familia: un muchacho con una mujer y un nene de aprox. 5 años; cerca de ellos había una chica sentada sola. A mi costado tenía a un muchacho y, sentado adelante, venía otro hombre más. Cuando el colectivo iba por la calle del riachuelo a la altura de Villa Jardín, en Lanús Oeste, una banda de 5 muchachos paran al colectivo y el chofer se detiene. Yo prejuzgué y me dije que apostaba que esos muchachos no eran de buena fe: yo tenía una bolsita elegante donde tenía mis cosas personales como mi celular, maquillaje y billetera y, tenía otra bolsa de nylon donde llevaba un frizzé y un Dr. Lemon para hacer la previa con los chicos. Eso lo coloqué entre mis piernas y las apreté, estos muchachos le dijeron al chofer que los llevara hasta algún punto más adelante y él cedió. Fue así como esos muchachos se distribuyeron por el colectivo semi-vacío, dos atrás, uno en el medio y dos adelante. Para sorpresa, ni bien hicieron dos paradas, uno de ellos se levantó y tocó timbre, cuando el chofer abrió la puerta, le manotearon el celular a la chica que venía sola sentada detrás de mí y salieron a correr dos. El que estaba cerca de mí, ni bien vio que sus cómplices hicieron eso, intentó escapar pero el chofer cerró las puertas y él quedó apretado, pero al volverlas a abrir, se bajaron los 5 muchachos por la puerta trasera. 

La chica entró en crisis, su primera reacción fue gritar y bajarse del colectivo a correr a los chorros que se habían quedado parado a metros del colectivo. La familia que estaba ahí le advirtió que no se bajara pero ella lo hizo, el chofer quiso arrancar el colectivo y ellos le gritaron que se detuvieran porque la chica dejó sus pertenencias. Fue así como la chica volvió mal, casi llorando y yo con mi corazón que latía a mil por horas... yo sabía que realmente algo así iba a pasar, lo presentía. A continuación, todos lo atacaron a gritos al chofer: que por qué los dejó subir sin boleto encima; cuya respuesta fue que si no lo hacía, corría peligro él. Entonces enojadísimo yo le grito "Pero hubieras pasado de largo, si sabés que esta zona es peligrosa sea la hora que sea" La familia le dijo que lo iba a denunciar en la CNRT y demás. Al llegar a Pte. Alsina, vuelvo a relatar para todos: "Es la tercera vez que veo que muchachos se suben en algún lugar del recorrido y cuando bajan en esta villa, manotean celulares de la gente que está cerca de la puerta, dos veces pudieron, una no". Con muchos nervios porque sentía que venían a atacarme, me bajé en Pompeya alrededor de las 12am y pensé tomarme el 15 hasta Pacífico. Me acerqué a la parada y veo a una chica sola y bien vestida:
-¿Estás esperando el 15? - Le pregunté
-No, el 112 y hace bastante que no viene - Al menos me dio un alivio que ella seguiría esperando y que mi colectivo vendría primero, pero no. A los segundos vino su colectivo y me quedé solo, ni loco... A lo lejos veo un 160 que viene, por eso corrí hacia la parada que está justo en el medio de la avenida frente a la Iglesia, y me lo tomé. Saqué boleto y caminé hacia el fondo hasta que siento que alguien me grita:
-Ay, pero qué divino - Cuando miro, estaban Ricky y Andrés en uno de los primeros asientos mirando cosas en sus celulares.
-¡Ay, chicos! ¡Qué gusto verlos! - Les dije y me senté de frente a ellos - No sabés lo asustado que estoy, en el colectivo que venía le robaron el celular a una chica, y no sabía si bajarme acá. Estaba paranoico - La gente nos miraba porque estábamos hablando en voz alta.
-Con razón ni cuenta te diste que estábamos acá. Yo vi la camisa y dije "wow, que lindo" Y te miré bien y eras vos - Dijo Andrés - ¿Qué trajiste en esa bolsa? - Ellos ya estaban tomando algo que no recuerdo que era.
-Me contagié de Mateo y traje un frizzé para que lo tomemos en la previa - Dije, en eso veo que Ricky lo agarra y lo abre.
-Ya fue, tomémoslo nosotros, los otros no lo merecen - Nos reímos y fuimos previando en el colectivo. 

Por un lado, le mostré las nuevas gafas que me compré, ellos me iban mostrando en su celular algunas cosas porno que venían mirando cuando yo subí al 160. Fue así como pasamos por la puerta de Amérika y bromeábamos con que nos íbamos a bajar para ir sólo al túnel. A mí me parecía gracioso pero lamentablemente Amérika ya no me atraía como boliche, no sé, creo que dos años seguidos hizo que me aburriera de ir Además de ir solo, también fui acompañado de distintas personas, etc. Y también, me es duro decir pero me trae muchos recuerdos: fue al primer boliche del ambiente que salí y viví miles de experiencias en una noche en AMK. Quizás fueron las mejores pero quiero aflojar con "lo sexual" y dedicarme a lo sentimental. Fue así como llegamos a Pte. Pacífico, nos bajamos y caminamos hacia el Mc Dondals donde deberíamos esperar a los demás chicos. Al estar el señor de seguridad, no podíamos quedarnos adentro sin consumir nada, la gente en la fila de los pedidos nos miraba por como estábamos vestidos y, obviamente delatando que éramos gay, al menos Andrés y yo. Por un lado Facundo todavía estaba en viaje, llegaría en 20 minutos, y Mateo algo parecido pero venía en auto. Recuerdo que Andrés quiso ir al baño, por eso lo acompañé y entramos; sin embargo yo dije
-Che, tengo hambre. ¿Compramos algo? Porque además estos chicos parece que van a tardar.
-Ay amigo, no tenemos plata - Me contestó Ricky pero yo cedí y les dije que les pagaba porque la plata en estos momentos no era lo importante, sino compartir momentos con ellos y disfrutar de la vida. Además, era cierto que ellos también tenían hambre. En mi caso fue una de las pocas veces que comía antes de ir a bailar porque realmente me estaba muriendo del hambre. Ricky me acompañó a hacer el pedido, recuerdo que no sé qué hicimos pero la chica de la caja no me cobró un pedido así que pagué dos y tuvimos 3. Creo que me lo merecía por ser solidarios con mis amigos, por eso subimos donde estaba Andrés sentado y ahí comimos, mirando a la gente y descalificando a los gays que andaban por Palermo al igual que nosotros. 

Nos empezamos a reír de las cosas que hablábamos, veíamos pasar los chicos al baño y hacíamos comentarios en voz alta y es más, cuando terminamos de comer, me animé a entrar al baño cuando un chico lindo lo hizo, pero solamente a lavarme las manos. Por detrás entra Andrés al ver que tardaba mucho pero en realidad nunca hice nada. Volvimos a la mesa y apareció Toto, un chico colombiano que salió con nosotros aquella vez que nos conocimos todos en Rheo. Se sorprendió de cómo nos comportábamos ya que estábamos haciendo el papel de "putas". Recuerdo que él bajó y se pidió su combo pero se sentó solo, tranquilo. Ricky, Andrés y yo bajamos y vimos a un chico muy lindo que estaba comiendo con su novia. Nosotros dos nos sentamos en la mesa larga que estaba casi en la entrada para poder verlo, y empezamos a hacer bromas: a mirarlo al chico, a guiñarle el ojo cuando él no miraba, a decir cosas en voz alta como por ejemplo "qué flaquito, mi amor" haciendo referencia a las frases célebres de Susana Giménez. Entre otras cosas, habíamos volcado lo que nos quedaba del Frizzé en un vaso de McDonalds porque generalmente no está bueno ir por la calle con las botellas, quizás porque la policía pueda decirnos algo al respecto. Entonces al tener ese vaso, íbamos tomando de a poco. Yo hacía bromas como chupando el sorbete mientras lo miraba a ese chico, o poner las piernas sobre la mesa y tocarnos, a todo esto captamos la atención de ambos: primero de la novia y después la de él; su sonrisa era de oreja a oreja. Fue así también como me di cuenta que yo admiraba la actitud de Andrés de ser gay porque él no tenía problemas de serlo, pero es muy distinta su situación a la mía. Yo, al menos, me desinhibía cuando salía con ellos, cosa que es valorada por mí porque nunca puedo ser yo y "estar en personaje" como el que estaba haciendo en esos momentos. 

Recuerdo que salimos del McDonalds porque los chicos estaban llegando; sin embargo, a mí el alcohol ya me estaba haciendo efecto y me sentía más desinhibido que de costumbre. Afuera lo mismo: veíamos pasar a chicos y los mirábamos, en algunos casos los tres manifestábamos alguna fantasía sexual con los que pasaban pero nada más. Así fue como apareció Facundo primero, y lo abracé y le dije:
-Ay nene, hace 'banda' te estábamos esperando ¿qué paso?
-No, perdí el último tren y tuve que venir en colectivo. Che, y a vos que te pasó, estás como muy "suelto" ¿Estuvieron tomando?
-Así es. Me los encontré en el colectivo a los chicos, menos mal porque yo estaba re asustado porque le robaron a una chica, pero ahora ya se me pasó. Tomamos varias cosas - Después de eso, recuerdo que esperamos algunos minutos más repitiendo nuestras acciones anteriores: mirábamos chicos y comentábamos y nos reíamos entre nosotros. Pero Facundo me contestó:
-Ay, estás muy 'pasivo' hoy, Fede. Vos no sos así de hacer estas cosas. Te desconozco - Me cayó un poquito mal lo que me dijo porque no sé si era para tanto. Yo no era otra persona pero sí estaba en "personaje", aunque bueno, no se porque no se lo tomaba de esa forma. A Facundo parecía desagradarle el hecho de que los 3 seamos gays como si él no lo fuese. Desde lejos, Ricky reconoció el auto de Mateo y, por eso, empezamos a gritar los tres:
-¡Mateo! ¡Amiga, acá estamos! - Nosotros levantábamos las manos y corrimos hacia el cordón de la vereda. Ahí él frena y baja la ventanilla.
-¡Ay, Mateo, llegaste corazón! Ya te estábamos extrañando
-¡Amigos! ¡Qué gusto verlos! - Nos dijimos algunos saludos más pero él fue a estacionar el auto. Cuando él volvió, recuerdo que fuimos a sacar la plata al cajero automático para las entradas. 

Para mí todo esto era muy loco, la verdad que la vida me hizo dar un giro bastante inesperado con respecto al tema ambiente gay. Entré, saqué la plata y era más que segura nuestra salida porque la teníamos en mano. Entonces Ricky se encargó de contactar a uno de los RRPP de esta fiesta en Terrazas del Este para que nos hagan un descuento aunque sea de $20 para cada uno. Volvimos, nos subimos al auto de Mateo y arrancamos para la costanera y, justo en ese trayecto, Toto lo llama por teléfono a Facundo porque lo habíamos dejado "abandonado". Nunca dimos marcha atrás, encima Andrés había puesto música a todo volumen del stereo y yo empecé a gritar como aquella vez cuando paseamos por todo Buenos Aires, no tanto de esa forma pero algo parecido, cosa que yo presentía por la cara que ponía, que Facundo se preguntaba a dónde había venido a parar. Yo también me preguntaba desde cuando Facundo se había vuelto tan puritano y todo un 'paki' en sus acciones. 

Llegamos y estacionamos el auto, ese día también nos encontraríamos con Nahuel y Darío pero, si no me equivoco, ellos iban a estar adentro. Fue así como a punto de entrar, tanto a mí como a Facundo nuevamente nos dio ganas de hacer pis, entonces fuimos a lo oscuro y descargamos. De pronto, a los gritos me llama Ricky, el chico RRPP estaba por ahí así que nos acercamos y compramos las entradas. No voy a ser malo pero lamentablemente mucho no me gustó el lugar y el ambiente, era la primera vez que iba a Terrazas; sin embargo, pensé que, como el organizador era el grupo Rheo (Crobar y Human) entonces iba a estar bueno... pero lo único que pude notar era que los chicos eran muy "asquerosos", de esos que nadie te mira ni te encara, que son todos inalcanzables, y muchos musculosos que solo histeriquean con otros musculosos como ellos. Si no me equivoco, me vino a encarar un chico pero que era feo; así que, obviamente yo no le di bola. Por otro lado, recuerdo que, en un momento, mientras todos estábamos bailando se nos acerca una chica y nos abraza y dice que le gusta salir a bailar a boliches gays porque es mejor que ir a boliches pakis porque nosotros somos muy amigables. Cuando nos unimos todo el grupo, paseamos por la pista al aire libre que esa fue una de las únicas cosas buenas pero el show que estaban ofreciendo era un poco mediocre. Además, estaba llenísimo de gente y no hacía mucho calor como para que todos estén ahí. Una de las cosas que nos llamó la atención fue que en el VIP estaba el conductor de televisión Marley, ahí fue cuando todos caímos en la verdadera conclusión: a mí siempre se me hizo que Marley era gay pero, como un tiempo se lo mezcló con Rocío Marengo como que eran pareja, pensé que yo estaba equivocado. Pero acá, que lo estaba viendo de cerca, caía en que es más puto que todos nosotros juntos. Ahí no se podía ni bailar, sólo recuerdo que vi a un muchacho bastante lindo. Yo tenía la ilusión que alguien me agarrara del brazo y me encarara pero, la verdad, todos eran bastantes creídos. 

Nuestra noche fue bailar en una pista que se encontraba adentro, aunque lamentablemente la música tampoco me gustó. Podía sentir algunas indirectas, muy indirectas por parte de Nahuel, quién se me acercaba y baila al lado de mí, o por ejemplo siempre me pasaba el vaso para que yo tomara lo que ellos habían comprado, y demás. Fue así que, cuando amaneció y la gente se empezó a ir, nosotros recorrimos el complejo y, al menos, yo me di cuenta de que existían otras pistas de baile donde no pasaran música de "rochos". Pero claro, si Nahuel era súper rocho al igual que Darío (gay afeminado que intentaba hacerse el rocho y no le quedaba). En ese momento, mientras recorríamos la parte de afuera, me lo crucé de frente a Ivo, el novio de Fernando, los chicos con los que estuve alguna y que fueron con los cuales tuve mi mejor experiencia sexual. Sin embargo, nos esquivamos, intercambiando algunas miradas sueltas... él estaba con unas gafas negras, con cara mala e iba de la mano con una nena no más de 7 años. Fue lo más raro de la noche, o no, lo más raro era que yo esperaba encontrarlo junto a Fernando pero no. Esto me daba pie para sospechar que quizás ellos ya no estén más juntos. Entre otras cosas, recuerdo que anteriormente cuando fuimos al baño con Mateo y Facundo, pude ver a un RRPP en persona, a quien yo lo tenía en facebook pero, sin embargo, nunca nos hablamos, sólo intercambio de mirada. 

Después, Mateo desapareció y nadie sabía donde estaba. Yo aposté a que, quizás, haya vuelto al auto porque se aburrió, pero nadie me creía y pensaban que quizás esté con alguien por ahí. Yo hasta me preocupé aunque nadie le daba importacia a lo que yo decía. A lo último, Facundo y yo fuimos los que nos sentamos y ya no bailamos. Nahuel se nos acercaba y me quería sacar a bailar pero no estaba de humor: la pasé genial con mis amigos, me encantó haberlos vistos pero el ambiente del lugar no fue lo que yo esperaba. A cada rato les preguntaba cuándo nos íbamos a ir, que seguramente Mateo nos estaba esperando y demás. Tras 20 minutos después, nos fuimos de ese lugar. Salimos todos juntos y era como yo había dicho: llegamos al auto estacionado y Mateo estaba ahí, sentado con ganas de volverse a casa. Y yo lo entendía porque, seguramente, yo también. Yo me subí al auto en el asiento delantero y estuve hablando con él, no recuerdo de qué, pero había un problema porque el auto estaba lleno y, Nahuel y Darío, iban a tener que volverse caminando. Ricky subió, Facundo y Andrés también así que era más que obvio que no iban a poder subir. Además, no me imagino sus reacciones frente a nuestra forma loca de vivir la vida. 

Arrancamos con el auto y nos fuimos de ahí ya cuando era de día, Mateo preguntó que queríamos hacer y lo primero que se nos ocurrió fue dar unas vueltas por la zona del aeroparque y la costanera. A pesar de que era domingo, se suponía que debía haber menos movimiento de gente pero parecía que había más personas. Anteriormente, habíamos cambiado de lugar con Andrés, por eso él se encargaba de la música. Yo hice lo mismo, sacaba la cabeza por la ventana y gritaba "Uuuuuuu". Pero no sé, las cosas no eran las mismas que la otra vez: Facundo me callaba y me decía que dejara de gritar y, creo, que yo estaba muy "loca" últimamente. Quizás haya sido su mala onda la que no nos dejó disfrutar el 'after'. Al pasar, por el aeroparque recuerdo que volví a gritar y la entrada estaba repleta de gente. Seguimos así hasta que llegamos a Plaza Francia y dimos unas vueltas por la Facultad de Derecho.
-¿Qué hacemos, chicas? Miren que hoy no me puedo quedar hasta tarde porque mi familia necesita el auto.
-Uh, ¿nos tenemos que quedar por acá? ¿Y qué hacemos? - Preguntó Andrés.
-No sé, supongo que cada uno a su casa - Contesté yo.
-Ay no, es un poco temprano para volver, aparte estamos acá - Siguió Ricky.
-A mí me da lo mismo - Terminó Facundo - Así que decidan ustedes - Tomamos la Av. Pueyrredón mano a Once y ahí fue cuando Andrés empezó a tener como visiones y se le ocurrió una idea.
-Yo por acá vine a un lugar donde habían un montón de hombre desnudos y podías tener sexo como en el túnel de AMK.
-¿En serio? - Preguntamos todos al mismo tiempo - ¿Cómo es eso?
-Pero hay que pagar, eso es lo malo. Quedaba por acá cerca, ahora que veo la calle Viamonte pero es para el lado del microcentro me parece porque cuando yo vine, después para irme pasé por el Obelisco. 
-Buscá ya en Internet desde tu celu - Así fue como Andrés busco datos sobre ese lugar donde habían muchos hombres lindo con los cuales tener sexo, mientras tanto, nosotros íbamos haciendo el presupuesto ya que Ricky no tenía plata y Andrés menos, Facundo tenía algo como para pagarse a sí mismo. Ricky no llegaba, por eso me preguntaron si yo tenía plata como para pagarles. 

En ese momento, se me vino a la mente que en la vida todo vuelve: el tema económico es un tema complicado. Recuerdo que Facundo me pagó cuando salimos a "Kiki" y, como no nos había gustado, nos fuimos a Whip. Entonces ahora, yo estaba, de alguna forma, devolviendo un favor. Da la casualidad también que yo estudio cerca de Pueyrredón y Viamonte, por ende yo conocía esa zona. Además, también tuve andanzas por esos lugares. Andrés no encontraba la dirección exacta, estuvo como 10 minutos por eso estuvimos dando vueltas con el auto por toda la calle Viamonte, fue así como dedujo la dirección y condujimos hasta ahí: era en esquina Callao, justamente a 2 cuadras de mi facultad, y a dos de donde vivían David y, posteriormente, Mauro. 
-Ahí, es en esa puerta blanca pero escuchen, ¿cómo hacemos? Porque hay que entrar de a uno.
-Mateo ¿vos no venís? - Le preguntamos
-No, chicas. Tengo que volver a casa, no me puedo quedar. Además, tampoco tengo plata.
-Si es por eso no hay problema. Sabés que acá pagamos nosotros, eso es lo de menos.
-En serio, si pudiese me quedaría pero bueno... la próxima será.
-Ay, gracias por traernos hasta acá y dejarnos en la puerta. Sos un amor.
-Eso sí, vamos a cojer por vos - Nos reímos de lo que le dijo Andrés. Entonces, lo despedimos a Mateo con abrazos y lo dejamos que vuelva a casa. Por otro lado, nosotros traspasamos esa puerta blanca traslúcida y lo primero que vimos fue una puerta de vidrio y una recepción más adelante. 

Nos abrieron y fuimos pasando de a uno, era un sauna gay en realidad. Andrés no supo explicarse pero era un sauna en donde los hombres andaban con una toalla y podías bañarte si querías. Había baños para hacer necesidades, dos habitaciones con aire caliente húmedo y seco y, más atrás, dos pisos de laberintos y cuartos oscuros donde vos te podías meter a cojer con alguien que te gustara: algo similar al túnel de AMK como habían dicho anteriormente. Cuando entramos, nos pidieron número de talle de ojotas, entonces nos dieron una toalla también. Fue así como pasamos y, de repente, lo vimos a Andrés que se empezó a desnudar:
-¿Qué? ¿Hay que sacarse toda la ropa? - Pregunté yo
-Sí, chicos. Por algo nos dieron las toallas y las ojotas. Aparte, tenés que guardar todas tus cosas acá en el locker.
-Pero yo no me puedo sacar la remera - Seguí
-¿Por qué? - Me preguntó Ricky.
-Tengo imperfecciones que es feo andar mostrándolas - Cuando me saqué la remera, ellos vieron que mi acné era horrendo. Ellos procedieron a sacarse la ropa, Facundo estaba muy tímido por mostrar su cuerpo, en realidad por ser muy flaquito y no tener nada de músculos. Por otra parte, Ricky quien era más gordito y grandote, no tuvo problemas. Andrés andaba prácticamente como Dios lo trajo al mundo, él sin problemas de ningún tipo porque tenía un cuerpo marcado. Para mi sorpresa, habían chicos lindos, eso que yo en ese sentido soy muy estricto pero, también, estaban los "viejos verdes". Cita textual que tomo de un blog que leí hace poco y que genero mucha polémica porque es verdad que todos alguna vez llegaremos a viejos, pero cuando llega a viejo, creo suponer que, hacer cosas de jóvenes, no va. Al menos, yo sé que cuando sea viejo, deberé buscarme a alguien con quién estar en pareja y no adoptar ese estilo de vida porque queda mal. No importa, sé que este tema es para debatir y que no todos tienen el mismo estilo de vida al ser mayores. 

Entonces continúo. Andrés nos dio una visita guiada por los saunas, por los baños y por el laberinto tunelesco, entonces yo lo primero que hice por recomendación de todos fue ducharme, o sea todos nos duchamos. Yo justamente quería entrar a la habitación de calor para ver si el acné se me podía llegar a curar como remedio casero, aunque no se podía estar ni dos minutos ahí porque el calor era muy fuerte. Nos mandamos al fondo, a los cuartos oscuros, no sin antes agarrar preservativos que estaban sobre la barra del bar. Poder ligar algo era complicado porque caminabas dos pasos y te cruzaba con Ricky o veía parado a Andrés esperando que alguien se le acerque. Pero vergüenza era lo que me darían ellos si me viesen que yo me agarraba alguno, o si yo encarara porque parecería necesitado. Por eso caminé y caminé, salía y volvía a entrar. Habían muchos cuartos en donde los hombres se metían y se quedaban acostados super-entregadísimos para que venga cualquiera y los tocara: si estaban boca arriba eran activos, y sino pasivos. Pero, como para mí, todo pasa por lo físico, no me metería a ninguno de esos cuartos sin antes mirarle la cara. Así que, nada, evité a toda esa gente que se entregaba. Vale aclarar que estaba todo oscuro, por ahí pasabas por el pasillo y sentías que alguien estaba atrás o que alguien venía de adelante pero no le veías la cara. Te tocaban dependiendo lo que buscaban, pero a mí, si me tocás la pija, ya no va. No estoy afirmando que todos son re pasivo, sino que, al contrario, me molesta que la gente pasiva no se de cuenta que yo soy pasivo y que, por lo tanto, no me gusta que me toquen la pija. Por un lado, mejor si no se me nota que soy pasivo. De repente, no encuentro a Facundo, desapareció totalmente. Según cuando lo crucé a Ricky, había entrado a uno de los cuartos con un muchacho y se había encerrado; eso sí no sé en cuál porque varios estaban ocupados. Fue así como, al parecer, Ricky también encontró algo. 

Yo veo en uno de los cuarto a un hombre mas o menos lindo de cara, pero tenía una actitud rara, tenía una botella y quizás estaba tomando alcohol. Yo tampoco quería cojerme a un borracho pero no, era raro ese hombre. Me tocó la cola y decidí probar que onda, por eso me metí al cuartito oscuro y cerramos la puerta; le toqué la pija que se le puso dura al instante y tenía buena mercadería. Me acuerdo que se acostó y lo pajeé mientras él también me tocaba la cola, aunque prefería que me pajee antes que me metiese un dedo.  Tomé coraje y se la chupé, por suerte no tenía ni gusto a alcohol ni a sucio, por eso daba gusto. Estuve un buen tiempo haciéndole un pete, recuerdo que agarró esa botella y le pegó un trago; sin embargo, no sé que era lo que había ahí realmente, yo seguía. Para que yo estuviera más cómodo, él se paró y yo me senté en la camilla que había, para estar mejor. Me agarraba de la cabeza pero tranqui, no era bruto, lo que sí era que él gemía placenteramente, como si realmente estuviera alcoholizado pero no. Los chabones eran re atrevidos porque querían abrir la puerta a toda costa para ver si podían enganchar algo a costa de otros que ya estuvieran cojiendo o capaz pajearse mientras miraban a otros.  Al principio, este muchacho echó a todos los que querían entrar, hasta que después pasó uno y nos miró cómo cojíamos, es más creo que hasta Ricky pasó y abrió un poco la puerta corrediza para ver quiénes éramos y qué hacíamos. Yo estaba dispuesto si uno lindo entraba y quería cojerme también, pero tenía que ser lindo. Se fue el tercero y quedamos los dos, me preguntó si me podía cojer, le dije que sí así que se volvió a acostar y yo me puse boca arriba. Primero le hice ponerse el preservativo. Entonces ahora sí podíamos jugar, mojó sus dedos y me los pasó para ir lubricando; sin embargo, me quiso hacer el beso negro antes, y bueno, yo me dejé. Además, yo estaba limpio, por eso mismo hicimos una especie de 69 donde el me chupaba el culo y yo la pija. Este hombre me lo dejó bastante lubricado, por eso mismo me volví a dar vuelta y pasé su pija por mi agujero: ese típico jueguito que se hace previamente antes de meterla y que está bueno. A mí me calienta y, supongo, que al otro también porque debe sentir una sensación de placer cuando pasan su pija por el agujero una y otra vez.

De a poquito me la iba a ir metiendo porque me podía llegar a doler, es que generalmente sí, por eso él me dejó a mí que la metiera, entonces de a poquito entraba, muy suavemente, y frenábamos porque empezaba a doler. Cuando entró toda, me cojió, quizás por el lugar y demás, daba como sensación de que se le bajaba pero hacía lo posible. Eso sí, estaba toda metida adentro y me cojía y me cojía, a los 5 minutos me preguntó si había algún lugar en el que me gustaría que me acabe pero yo le dije que me acabara adentro, total nos estábamos cuidando. Yo me empecé a pajear, ya que estábamos yo también quería acabar; y esta situación me hizo acordar a cuando yo cojía con Joel: me sentaba sobre su pija y me gustaba que me cojiera así yo acababa de esa forma. Algo parecido me había propuesto Tony pero nunca llegué a excitarme totalmente con él. Este hombre me dejó acabar primero, así que acabé sobre su panza y pecho, y él me empezó a cojer duro hasta que acabó. Gimió mucho, al parecer le gustó. Recuerdo que me levanté y él se sacó el preservativo tirándolo al tacho de basura, con las servilletas de papel nos limpiamos y me propuso que, si tenía ganas dentro de un rato, que volviera porque a él le había gustado cojerme. Sin embargo, yo no sé si podría otro round así que salí, le dije "Chau". Una vez afuera, me encontré con Ricky quién me preguntó qué onda y le respondí que estaba todo ok pero que me iba a ir a mi casa porque ya había cojido y, cuando yo cojo una vez, ya no tengo más ganas de nada. Andrés andaba dando vueltas por ahí y Facundo nunca salió desde que lo perdimos, tal parece que estaba disfrutando y a lo loco, por eso mismo, ni le dije nada. Me fui al vestuario, a los lockers y me cambié para salir y volverme a mi casa mientras ellos seguían disfrutando de su estadía en el sauna. Entre otras cosas, volvía a mi casa porque después de tener sexo: o me duelen los testículos o me dan ganas de ir al baño. Según Ricky, Andrés se cojió al mismo cuando yo me fui, no sé si será cierto aunque en mi caso nunca me agarría las sobras de otro. Recuerdo haber salido, haber caminado hasta Av. Corrientes y Callao, zona conocidísima para mí e ir al cajero a sacar plata por si necesitaba durante la semana. Caminé unas cuadras más hasta que bajé al subte y me lo tomé para después combinar con un colectivo y llegar a casa.



F.A.M.