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miércoles, julio 09, 2014

#103 - Destino

Si hay algo que sé es que dudo si el destino existe o no. Trato de no usar esa palabra y de decir que "la vida" nos lleva por un camino u otro pero, en realidad, no sé si es así también, si es que realmente nosotros escribimos nuestras propias páginas. A propósito, tengo buenas y malas noticias... empezamos por la mala: todavía sigo con este decaimiento y cansancio, quiero mis 3 semanas merecidas de vacaciones para despejarme y, después, sí volver con todo. Aunque esto no influye en mi ámbito social, con mis amigos. Y acá viene la buena: a principios de año, o sea en las vacaciones de verano, que también salíamos todos los fines de semana, Agustina conoció a un chico que decía ser bisexual y en varias ocasiones se lo comió. Creo que captaron por dónde viene la cosa, ¿no? 

Recuerdo cuando, una vez, me volví de bailar en colectivo con ella y, justo en la parada del 47 en Chacarita, nos cruzamos a este chico con su amigo, ahí fue cuando los vi besarse. Yo le dije a Agustina: "que ese chico no se haga el paki porque es más puto que yo". En fin, creo haberlo visto dos veces más y reconocerlo apenas como "el amigo paki de Agustina que viene a boliches gays"; sin embargo, no es el único conocido de ella que se pone en ese papel. Bueno, la cosa que Agustina dejó de salir desde que la rutina la consumió y abandonó el ambiente por un tiempo - la vi el sábado hablando de todo un poco - y al chico me lo crucé una vez en Puerca la noche que me puse histérico y de la cabeza porque el chico que se parecía a Martín me ignoró y hasta me corrió la cara podríamos decir, cosa que en algún momento lo contaré. Entonces mientras yo estaba parado, apoyado contra un caño y con cara mala, aparece este chico con su amigo y me ofrece un chicle diciéndome:
-Cambia esa cara que cuando sonreís te ves lindo - Y atiné a sonreírle lo más falsamente que pude. Él puso sus dedos índice de sus dos manos, uno en cada extremo de mis labios y empujó hacia arriba, como queriéndo hacerme sonreír.
-Gracias - Le contesté y él se fue. Vi que me tiró una señal pero nada más. Al tiempo, varias semanas después, lo volví a cruzar y esta vez ya nos habíamos besado después de que yo tomara unas cuantas copas y después de que él diera el paso... puedo llegar a decir que me gustó él como chico. No es mi ideal, ni tampoco me veo en pareja con él pero es algo que siento que nunca antes me pasó: gustarme un chico y que él me de bola. Es lindo pero no es perfecto (como a mí me gustan). Me encanta su sonrisa de actor de Disney que tiene y su cara angelical como esos que habitan en el paraíso... 

Ayer me lo crucé y me saludó, y cuando se fue me sonrió nuevamente dando una señal. Me lo volví a cruzar cuando salí del baño, él estaba haciendo la fila para poder entrar, me tocó la mano y me acerqué a hablarle mientras yo estaba con Elías. Fueron dos o tres cosas que le dije hasta que le robé un beso en la boca: nada más. Sin embargo, me lo volví a cruzar mientras yo bailaba y me precipité a llamarlo tocándole la espalda, ahí cerca del escenario hablamos y le pregunté qué pasaba que hace tiempo no lo veía. Me respondió que él sí vino, el sábado también lo hizo y me vio bailando provocativa y eróticamente con "ese amigo mío con el que siempre estoy" haciendo referencia a Damián - tema que tengo pendiente de contar todavía. Y que entonces no se me acercó por eso mismo... en fin, me quiso meter el chamuyo de que está en pareja y que vino con el amigo de su pareja y bla bla bla... cuento infantil que uno cree que le sirve de algo pero que todos lo conocen. Cuando miró a su costado, el amigo de su "pareja" se estaba besando con otro y me terminó comiendo la boca, y así estuvimos un buen rato hasta que el amigo ese de él terminó de besarse y nosotros también. Cuando me resigné, ya que no se la va a jugar por mí, lo solté y me prometí que no lo volvería a buscar. ¿Para qué gastar balas en chimango? Diría mi abuela. Entonces me di la media vuelta para volver con Elías y, ni bien hice un paso, él me toma de la cintura por atrás y me besa de atrás, baja sus labios a mi cuello y me succionó como si fuese un vampiro sediento de sangre dejándome una marca como a mí me gusta que los chicos que me gustan me hagan.
¿Posible candidato? Me encantaría, pero veamos porque no es un proceso fácil el de conocer a alguien, y más aún si me adelanto y digo "conocer a alguien" para pareja que requiere mucho más tiempo, error que cometí con Joel cuando lo conocí. Tiene una combinación delicada y exquisita, como dije, no es perfecto ni mi ideal pero tiene ciertos rasgos finos y se le nota que es buena persona, me quiere (del verbo desear) y da señales de eso y me da hasta la confianza como para que yo de el paso para poder convergernos. Debería tener yo la capacidad para que renuncie al papel de bisexual... un gran desafío. Espero poder verlo, sólo el destino dirá cómo siguen las cosas en mi vida y, según una tarotista en el día de mi cumpleaños, me dijo que yo estaría en pareja "ya, ya" con un chico de entre 18 y 25 años de pelo castaño ¿será él? Me lo confundí con el chico parecido a Martín, con un amigo de Damián pero ninguno de ellos fueron...
F.A.M.