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domingo, diciembre 08, 2013

#42 - En Mi Piel [1x3]

"¿Hola divino, cómo estás?" "Sos un amor, un tierno" "Me encantás porque sos hermoso, te traería acá conmigo" "¿Cuándo nos vamos a ver?" Eran algunas de las frases que Santiago me decía por whatsapp, habré estado hablando con él todos los días de enero y con Agustín también, pero como a él no lo conocía, sólo eran charlas light: "¿Qué hacés, todo bien?" "Bueno hermoso, te dejo" Esas eran frases que él me decía, y aunque él fuese más lindo que Santiago, yo trataba de ser lo más tímido posible porque no sabía qué iba a pasar con esta situación. En un determinado momento, Santiago me preguntó si yo tenía pensado irme de vacaciones, a lo que contesté que no porque mis papas se iban a casa de unos familiares en la provincia de Entre Ríos; en realidad sí quería irme, pero no tenía con quién ya que con Joel yo había cortado la relación. Tampoco quería ir con mis papás porque ya estoy grandecito para las vacaciones familiares. Por otro lado, Santiago me dijo que entonces quería verme en estos días y hablar sobre nuestras vidas, que le gustaría que yo fuese a su casa y me quedé una noche; pero estaba tan ocupado que se le complicaba. 


Así como mis papás se fueron de vacaciones y yo me quedé casi 1 semana solo en casa, esos días los pasé escuchando música a todo volumen y hablando por whatssapp o facebook con mis amigos; y es más, a Facundo lo invité para que viniese y pasemos una noche juntos. Habíamos estado enviándonos mensajes y hasta fotos, con lo que terminé de deducir que él sólo era pasivo y lo pensé dos veces a la hora de traerlo. Le expliqué cómo tenía que hacer para llegar a mi casa y que nos encontraríamos en una estación de trenes para después venirnos juntos en colectivo. Él dudó mucho de eso, a tal punto que se hizo el tonto y no me contestaba los mensajes y ponía excusas a cada iniciativa que yo le hacía; fue así como todo se frustró y los planes los tiré a la basura. A medida que fueron pasando los días, Facundo dejó de hablarme por whatsapp, era obvio porque creo que yo me había vuelto pesado y es sabido que dos pasivos no sirven más que para amigos. 

Christopher me vivía tirando onda, se había como enganchado y todas la noches me hablaba, tiraba el lance preguntándome cuándo nos íbamos a ver y yo le hacía chistes porque él estaba en pareja y no podría llegar a hacer nada. Siempre decía que algún día iba a hablar con Lautaro para poder concretar algo aunque yo siempre deduje que era coqueteo, más que fotos y charlas por whatsapp no iba a pasar. 
-¿Ves que te asustás? Me decís para vernos pero cuando te apuro te tirás para atrás.
-Es que no tenemos lugar, sino hace rato hubiésemos tenido algo - Pero recuerdo una noche haber recibido un mensaje de Christopher alrededor de las 2am, un corte de luz tuvo al barrio a oscuras en la noche y con la poca señal que tenía leí que me dijo "Hola"entonces yo le contesté:
-Qué raro vos despierto siempre a esta hora. Hay gente que duerme - De pronto, veo una foto de Lautaro semidesnudo y me sorprendí preguntándole que había sido eso. Y me preguntó si me gustaba, a lo que respondí que sí, pero que no entendía por qué me enviaba fotos de su novio. Me dijo que estuvo hablando con él y que había aceptado una propuesta para vernos y estar juntos, un trío. Tras mi confusión le volví a preguntar si era broma o no ya que yo estaba dispuesto a todo, que no tenía miedo a nada. Me confirmó enviándome más fotos de Lautaro en bolas, pude apreciar su pija antes de conocerlo personalmente y tenía un buen pedazo, aparte a mí me gustaba él y no Chris aunque si tenía que estar con Chris por Lautaro lo iba a hacer.
-Ok, ¿y cuándo nos vemos? Mirá que yo agarro viaje, eh.
-Vamos a tener la casa sola la semana. Vos tenés que venirte para zona norte.
-Si, yo no tengo problemas.
-Seguramente sea el martes ¿podés? Te venís hasta la estación y de ahí te pasamos a buscar en remis. Comemos algo acá, hamburguesas con papas fritas ¿te parece?
-Si, genial. Al fin concretamos, eh, era hora.
-Bueno, te voy a decir algo... el que te está enviando mensajes soy yo, Lautaro - Yo yo quedé con la boca abierta.
-¿Posta? ¿Y qué haces con el celular de Chris?
-Igual él me dio permiso, me convenció tanto que acepté.

Lautaro y Chris viven juntos por si no lo dije, en la casa de Chris, ellos tienen una parte de la casa para ellos, los padres ya sabían todo sobre ellos. Al principio, Chris me contó que la madre sabía que Lautaro era su pareja, pero su padre no. Tampoco daba que ellos caigan con un tercero a la casa, además los ruidos y movimientos serían sospechosos, por ende, preferían tener la casa sola. Durante esa semana estuvimos arreglando los detalles del encuentro hasta que llegó el día martes. Al principio, sentí cierta desconfianza porque más de dos veces no lo había visto a Chris y sólo había intercambiado pocas palabras cuando nos vimos. Aparte, el altercado con lo de Joel hacía meses atrás, me generaba dudas sobre su persona, pero no importaba, después de un año y algunos meses de habernos conocido, recién estábamos por vernos.

El día del encuentro, debía llegar a las 23.30hs a la estación, por eso a las 22hs salí de mi casa y me tomé un colectivo que me dejaría en la Est. Aristóbulo del Valle. Cabe recalcar que yo soy de zona sur entonces tenía un lindo viaje hasta allá. Al bajar en Pte. Saavedra, caminé hasta la estación con el Jesús en la boca porque debía pasar por zonas oscuras y sobre todo en la estación porque, al estar debajo de la avenida, debía cruzar por un túnel. En sí, la estación misma se encuentra en un túnel pero yo ya conocía ese lugar porque justamente para ir a la casa de Patricio - mi ex mejor amigo ya en ese tiempo - siempre con los otros chicos nos tomábamos ese tren. Prácticamente Patricio y Chris viven cerca. Esperé varios minutos hasta que el tren llegó y en todo momento iba sujetando el bolso para que nada pasara. Tras 40 minutos le confirmé a Chris que estaba llegando y me dijo que lo esperara en la estación porque el remis todavía no había pasado a buscarlos. No era ni horario ni lugar como esperar solo, entonces salí de la estación y esperé donde había gente, hasta que Chris me envía un mensaje diciendo que Lautaro me pasaba a buscar. Cuando él llegó, subimos al remis para ir a casa de Chris. 

Todo se me hacía raro porque lo saludé y me quedé sentado a su lado, o sea nunca estuvimos cara a cara ni nunca había hablado, prácticamente Lautaro era un desconocido. Entonces empecé a sonreir, a mirarlo y a mirarlo más. Él con cierta seriedad me miraba y no entendía por qué me reía, yo mismo no paraba de asombrarme hasta dónde era capaz de llegar. Bajamos del auto y entramos a la casa, ahí me estaba esperando Chris y me saludó, pasé y me dijo que me ponga cómodo, que me sentara y dejara el bolso por ahí. Me ofreció Pepsi para tomar y me preguntó si ya tenía hambre para comer, le dije que estaría bueno ir cocinando para comer y hablar.
-Waw, esto me parece re loco. O sea, a vos te vi 2 veces como mucho y ahora estoy acá, es más casi ni conocía tu voz. No aparentas nada de lo que sos en persona, sos como más tímido, Chris.
-Ay este chico se venía riendo en el auto y no sé de qué. Me daba miedo ya - Dice Lautaro.
-Es que sí, a vos no te conozco, por eso mismo. Mirá si me llevabas por ahí - Estuvimos hablando un buen rato hasta que la comida estuvo lista, por eso preparamos la mesa y nos sentamos a comer. Creo que siempre insisto en lo mismo, es un gran gesto de la otra persona que te invite a comer pero a mí me genera bronca porque está bueno compartir una cena, pero para un pasivo eso es perjudicial porque a la hora de tener sexo, puede generar percances. Tras un buen rato hablando de nosotros, me dijeron para ir a la habitación y ahí permanecer, así que nos fuimos del comedor y al llegar ellos ya planeaban cómo íbamos a hacer para "dormir". Dijeron tirar el colchón de 2 plazas al suelo y ahí dormir, así que lentamente fuimos haciendo eso, mientras tanto ver algo en la televisión. 

Me acuerdo que Chris quería ambientar el lugar como una película porno, una luz tenue, comodidad y algo de tomar. Todas esas ocurrencias las adquirió con experiencia, estaba seguro que yo no iba a ser el primero entre ellos dos aunque me extrañaba que sean este tipo parejas ya que en sí no eran parejas si siempre buscaban a un tercero con el cual estar. En fin, al terminar con la ambientación, y ellos me prestaron un short para dormir más cómodo, nos acostamos en la cama y nos miramos los tres:
-Y bueno, ¿qué hacemos? – Preguntó Chris - ¿Cómo empezamos? – A mí me descolocó totalmente, ¿no se suponía que ellos eran los expertos en los tríos, cómo pueden quedarse así y encima preguntar qué hacemos? Entonces tomé la iniciativo yo, los empujé suavemente a ambos para que se acuesten y lo besé lentamente q Christopher mientras miraba de reojo a Lautaro. Al instante, lo beso a Lautaro mientras miraba de reojo a Chris.
-Ah bueh, sos bastante morboso vos – Me dijo Christopher y seguimos así un rato hasta que me quedé un buen rato besándolo a Lautaro y él ya me empezó a meter manos. Lentamente me tocaba el culo y metía su mano por mis piernas, casi tocando todo. Chris que miraba se metió la mano adentro del pantalón y se empezó a pajear, después de eso me volví con Chris y le toqué el bulto mientras lo besaba, y él también acarició mis nalgas. Me tiré entre medio de los dos en la cama mientras lo seguía besando, y Lautaro me apoyó de atrás así sentía su bulto, hizo algunos movimientos pélvicos mientras me besaba el cuello. Ahí comenzó la acción. Me volví a dar vuelta para besarlo a Lautaro pero esta vez, hizo que yo terminara encima de él que estaba acostado, me movía yo para sentir su pija dura y él mis nalgas por adentro del short. De a poquito iba queriendo meter unos dedos, sin embargo yo me negaba entonces me puse en cuatro apuntando hacia Chris, él se acercó y me apoyó. Los besos iban y venían, se unió Chris y nos besamos los tres juntos. Sacó su pija y empezó a refregármela entonces yo de a poquito iba pasando mi lengua por el cuerpo semi perfecto de Lautaro, es de esos pibes flaquitos por naturaleza que se le marcaba los abdominales por el simple hecho de ser flaco; algo así como me gustan a mí. Llegué al borde de su pantalón, y no me importó, metí un poco de lengua por ahí hasta que después se lo fui bajando para chuparle la pija, él me agarró de la cabeza y me la hizo meter toda en mi boca. 

Christopher se acercó y frotaba su pija en mi agujerito una y otra vez, hacía fuerza como para poder metérmela pero en realidad jugaba, hasta que de pronto me la mete y yo pegué un gemido que se salió la chota de Lautaro de mi boca.
-Pará que duele – Le dije, ya que él tenía la pija más grande que Lautaro. En ningún momento había interés de usar protección, y bueno, si ellos estaban seguro con quiénes lo hacían, allá ellos. En mi caso, yo estaba sano. Me la volví a meter y me cojió suavemente mientras yo chupaba la pija de Lautaro quien me pegaba pequeñas cachetadas en la cara – Mirá que a mí me encanta que me peguen – Y Chris me dijo lo mismo pero de Lautaro, que al le gustaba pegar – Entonces seguimos de esa forma, yo se la chupaba mientras él me pagaba.  Cambiamos de roles, ahora Lautaro iba a probar mi colita, y tanto que se había hecho el difícil, ahora me iba a coger, entró de una porque yo ya estaba dilatado, entonces se movió y se movió mientras me agarraba del cuello o de los pelos y me tiraba la cabeza para atrás para besarme en la boca y en el cuello. Mientras yo estaba en cuatro, Chris se paró delante de mí para que yo le chupara la pija, pero era tantos los movimientos que hacía Lautaro que no me permitía chupársela a Chris. Exigí cambiar de pose porque esa no era mi preferida, él quiso que yo me sentara sobre él, una de mis preferidas. Otra vez su pija entró de una en mi culo y yo lo empecé a montar, a Lautaro sí que le gustaba tirarme de los pelos y hasta pegarme mientras me decía que lo cojiera.
-Dale Chris, vení que vamos a hacerle la doble penetración – Y mi cara de preocupación era de terror al escuchar esas palabras. No quería hacer la doble, no sé si estaba preparado pero me iba a doler muchísimo. A todo esto Chris estaba parado con su celular al lado de la TV - ¿Qué pasa Chris? – Repitió Lautaro.
-Nada, no sé, como que no da – Dijo él, mientras yo estaba montado sobre Leandro, con su pija adentro de mi culo.
-¿Qué, cómo que ‘no da’? Que te vengas para acá dije – Le exigió Lautaro pero Chris no tenía interés alguno en seguir cojiendo - ¿Vos me estás hablando en serio? – Lautaro sacó su pija de mi culo y miró con cara de orto a Chris.
-Ustedes sigan, yo me quedo acá, prefiero mirar.
-No, Chris. Se supone que la cosa era cojer los tres, no vengas ahora a decir que no querés – Lautaro se levantó enojado y estuvo así unos momentos hasta que después se fue de la escena de la habitación. Yo no sabía qué hacer, era la primera vez que me pasaba algo por el estilo, que me invitaran y después en el medio de la acción, todo se cortara. Traté de remontar la situación y le dije a Chris 
-¿Qué pasó? ¿Y Lautaro, a dónde fue? – Pregunté en vos baja.
-No sé, como que se me fueron las ganas. Este se habrá enojado, pero dejalo que se le va a pasar. Yo como que me recuperé un poco y me acosté, le dije a Chris que haga lo mismo y se acostó a mi lado. Nos besamos un rato y nos preparamos como algo así para dormir, apoyándome su bulto en mi cola. A los minutos le volví a presentar mi inquietud a él.
-¿Y Lautaro, se enojó? – En parte no quería que la acción con él terminara.
-Esperame que lo voy a buscar – Me respondió, se levantó y desapareció de la escena. 

A todo esto me quedé solo por varios minutos, observando la habitación, con miedo de encontrar una cámara espía que me esté filmando (re paranoico). Me intrigaba qué estarían hablando, si estaban discutiendo en la cocina o algo de mí no les gustó, o si la íbamos a seguir. Por un momento me dije a mí mismo: Quién mierda me mandó a este lugar, tenía ganas de volverme pero eran las 4am y yo estaba a casi 2hs de mi casa. Pasado esos minutos, vuelven ambos y Lautaro se tira en la cama, serio y con cara de malo; yo no sabía que iba a pasar. Quedé en el medio de los dos y empecé a tranzar con Chris, en mi caso actué un poco y gemí cuando me tocaba la cola, le toqué el bultos y así volvimos al clima del sexo. Lautaro quedó mirando deseando unirse y seguir cojiéndome; de pronto estira la mano y empieza a tocarme la cola, se acercó y me besó el cuello. Me di vuelta y seguí con Lautaro, lo besé y enseguida me empezó a frotar su pija en mi cuerpo, Chris aprovechó y me mandó su pija de una y yo seguí gimiendo esta vez más fuerte. Me puse en cuatro así podía chuparle la pija a Lautaro y Chris siguió mi ritmo, estuvimos unos minutos hasta que cambiamos roles, esta vez Lautaro se paró y se apoyó contra la pared, Chris se sentó sobre él y lo cojió, Chris me agarra y hace que me apoyé contra él: “sandwichito” se llama esa técnica. Lautaro se movía para cojerlo a Chris y con ese mismo movimiento Chris me cojía a mí. Después de unos largos minutos en esa pose pedí pido (un descanso) porque había empezado a haber un escape de mi parte. Fui al baño rápido a limpiarme y cuando volví, Lautaro propuse que me acabaran, me pidieron que me acostara y me iban a acabar en el pecho aunque mi fantasía siempre fue que 2 o más chicos me acabaran en la boca y tragarme esa mezcla. Sentí como gemían los dos para volcarme toda la leche, y después quedaron exhaustos; me trajeron servilletas para que me limpiara. Y tras acomodar un poco la habitación, me quedé en el lugar del medio y dormimos así, aunque vale aclarar dos cosas: Lautaro miró hacia la pared toda la noche y al otro día nos teníamos que levantar temprano porque ambos trabajaban.

Nos despertamos, nos cambiamos y salimos hacia la parada del colectivo que nos iba a dejar en la estación para luego tomarnos el tren. Sentía esa mala onda por parte de Lautaro, estaba enojado por lo que pasó anoche y nunca me enteré de qué hablaron, obviamente yo hacía el que no me interesaba. Una vez en el tren, me senté al lado de Chris y en frente de nosotros él con su cara de amargo y lo único que deseaba era llegar a mi casa y replantearme la posibilidad de que haya otro trio con ellos. Al bajar nuevamente en Puente Saavedra, Lautaro bajó conmigo porque él trabaja por Palermo en esos tiempos e iba a hacer combinación con un colectivo. Me atreví a hablarle, no me parecía mala idea, ahora que estábamos solos capaz cedía a charlar conmigo, le hice preguntas tontas: qué colectivo se tomaba, a qué hora entraba, etc. A la hora de saludarnos me dijo “Chau nene, cuídate” Con ciertas ganas de querer tener otro encuentro. Desde ese día no nos volvimos a hablar hasta que Chris tomó la iniciativa a los días siguientes:
-Era obvio que no me ibas a hablar después de lo que pasó. Pero bueno, no me gustó, sentí que entre vos y Lautaro había más química por eso los dejé solos.
-¿Pero era necesario que pararas todo? Encima el otro parece que se re enojó.
-Si, que se yo, no me gustó.
-Ay, andá a cagar, sos el primero que me dice que no le gustó estar conmigo. Me tiraste el ego al piso, pero no importa, es obvio que yo también la pasé mejor con otros.



F.A.M.